Lo peor que podemos hacer es dividir fuerzas, alentar disensiones, perseguir quimeras, ahondar heridas
El rey Juan Carlos alerta en una carta publicada en la nueva página web de la Casa del Rey contra quienes en España alientan "disensiones", persiguen "quimeras" y ahondan en heridas, porque en un momento de difícil coyuntura económica sólo se superarán las dificultades "actuando unidos" y "remando a la vez".
"Estamos en un momento decisivo para el futuro de Europa y de España y para asegurar o arruinar el bienestar que tanto nos ha costado alcanzar", subraya el monarca, que a continuación hace una reflexión sobre los peligros que acechan a la sociedad española.
Así, advierte de que "en estas circunstancias, lo peor que podemos hacer es dividir fuerzas, alentar disensiones, perseguir quimeras, ahondar heridas", y añade: "no son estos tiempos buenos para escudriñar en las esencias ni para debatir si son galgos o podencos quienes amenazan nuestro modelo de convivencia".
Y explica a renglón seguido: "son, por el contrario, los más adecuados para la acción decidida y conjunta de la sociedad, a todos los niveles, en defensa del modelo democrático y social que entre todos hemos elegido".
RAJOY DIO EL VISTO BUENO
La publicación de este mensaje en la página web de la Casa del Rey se produce el mismo día en que don Juan Carlos ha presidido el solemne acto de apertura del Año Judicial en el Tribunal Supremo. La iniciativa partió del Rey pero el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dio el visto bueno.
En la misiva, el monarca asegura que "sólo superaremos las dificultades actuales actuando unidos, caminando juntos, aunando nuestras voces, remando a la vez" y previene contra la división. También destaca que "desde la unión y la concordia hemos de recuperar y reforzar los valores que han destacado en las mejores etapas de nuestra compleja historia y que brillaron en particular en nuestra Transición democrática".
Aquí cita el monarca los valores del "trabajo, el esfuerzo, el mérito, la generosidad, el diálogo, el imperativo ético, el sacrificio en los intereses particulares en aras del interés general", así como "la renuncia a la verdad en exclusiva".
