jueves. 28.03.2024

Patxi López abandonará la secretaría general del PSE-EE después del congreso extraordinario que los socialistas vascos celebrarán el próximo mes de septiembre para renovar la dirección del partido. Con esta decisión, que López ha anunciado este martes en una comparecencia ante los medios de comunicación, pretende provocar "una catarsis" en la formación tras los "malos resultados" de las elecciones del pasado domingo, que han sido "una clara llamada de atención".

El líder de los socialistas vascos transmitió su decisión a la Comisión Ejecutiva de los socialistas vascos, que se reunió este lunes en Bilbao, después de conocerse que Alfredo Pérez Rubalcaba renunciaba a la Secretaría General del PSOE y que convocaba un congreso extraordinario para julio.

Patxi López ha reiterado que los resultados de las europeas han sido "malos para los socialistas en España y en Euskadi", y que no se puede echar "la culpa ni a otros, ni mucho menos, a la ciudadanía".

"Nosotros somos los únicos responsables de no haber sabido conectar con la gente y de no habernos convertido en la gran referencia política de las personas progresistas de Euskadi y del conjunto de España. Por lo tanto, creo que el PSOE está obligado a adoptar decisiones que nos ayuden a cambiar esta deriva preocupante que nos ha hecho perder apoyos de manera continuada en los últimos años", ha añadido.

A su juicio, hay que poner en marcha "un partido que sea capaz de cambiar y de adaptarse al ritmo de las exigencias de los progresistas de este país", y para ello, "no basta con cambiar la foto del cartel electoral, que es fundamental y se va a hacer sí o sí", sino que hay que "ir más allá y repensar el partido, la organización interna y los liderazgos".

"Estábamos obligados a hacer esto en España, pero estamos también obligados en Euskadi. Cuando en febrero del año pasado celebramos nuestro Congreso, lo hicimos con una voluntad de regeneración y apertura que, es evidente, no ha tenido resultados positivos, y por lo tanto, tenemos que hacer una reflexión seria de por qué, en una situación de crisis como la actual, seguimos perdiendo apoyos entre el electorado progresista", ha aseverado.

A su juicio, la bajada de votos en la Comunidad Autónoma Vasca es "una clara llamada de atención por parte de las bases de izquierdas de este país". "Y debemos responder a este mensaje", ha apuntado.

Patxi López ha afirmado que no cree "en las democracias de televisión", en referencia a 'Podemos'. "Creo en la colaboración activa de las personas, en los debates abiertos, y en las propuestas políticas organizadas y viables. Los gritos, son sólo gritos", ha indicado, para rechazar que se califique de 'frikis' a los integrantes de esa formación.

En esta línea, ha precisado que "el objetivo de la izquierda democrática no es exacerbar a unos colectivos que se han quedado sin esperanza". "Nuestro objetivo es plantear alternativas políticas reales que busquen el esfuerzo compartido, la solidaridad cívica para no abandonar a nadie, y lograr el progreso colectivo", ha indicado.

A su juicio, "la organización socialista es más necesaria que nunca", y para "provocar la reacción" que el PSE-EE necesita planteó ayer a la Ejecutiva la reunión del Comité Nacional del PSE, que finalmente se celebrará el próximo 3 de junio, al que propondrá la celebración de un Congreso para el próximo mes de Septiembre.

"NUEVAS ESTRATEGIAS Y NUEVAS CARAS"

En esta cumbre, López pretende que se definan "nuevas políticas y nuevas formas de hacer política y también nuevas personas". "Los nuevos tiempos exigen nuevas caras", ha apuntado.

Tras recordar que accedió a la Secretaría General en 2002 y, con él, "buena parte de las personas" que hoy componen su "núcleo más cercano", ha destacado que se pusieron al frente del partido para liderar "un cambio de ciclo en el socialismo vasco", que finaliza ahora. "Entendemos que toca ya un nuevo cambio y dejar paso a una nueva dirección", ha dicho.

Su nombramiento se produjo dos días después de que ETA asesinase al concejal socialista Juan Priede y hoy los ediles del partido "pueden pasear por su pueblo sin escolta". "Sólo por eso, merece la pena haber liderado esta formación", ha afirmado.

Asimismo, ha recordado que su Ejecutiva ha hecho "grandes cosas" como convertir al PSE "en la primera fuerza en los tres territorios de Euskadi" o liderar "un Gobierno Vasco en solitario, en medio de la peor crisis que ha conocido este país" y ha sido "imprescindible en la derrota del terrorismo de ETA".

Patxi López ha asegurado que es su responsabilidad dejar el PSE "en condiciones de volver a ser pronto la principal referencia progresista de Euskadi". "Toca que la militancia socialista elija una nueva dirección", ha indicado.

"En Euskadi tenemos que ser capaces generar confianza con un proyecto de modernidad alternativo al nacionalismo, que parta del respeto a la pluralidad de la sociedad vasca. Y lo debe hacer sobre la base de su vocación de gobierno y con un proyecto propio y creíble; un proyecto de certidumbres frente a todas las incertidumbres que para mucha gente encierra hoy el futuro", ha manifestado, para asegurar que colaborará "activamente para conseguirlo".

El líder del PSE-EE ha asegurado que su cargo "no es hereditario, no se hacen herencias, como en otros partidos que se eligen a dedo", ha manifestado que el nuevo secretario general del partido en Euskadi lo designará la militancia.

"Necesitamos savia nueva en este partido, gente capaz de con ilusión y con ganas casi revolucionar al PSE-EE para adaptarse a la nueva realidad, y perfiles pueden ser varios y personas también, tenemos gente magnífica en este partido", ha dicho.

En esta línea, ha asegurado que él podía haberse quedado "tranquilamente" como líder del PSE-EE porque "no tenía a nadie que me forzara a otra cosa", pero ha querido "provocar esta catarsis" en su partido.

Preguntado por si su futuro puede pasar por ser secretario general del PSOE, López ha indicado que hará lo que "ha hecho siempre, es decir, ayudar al partido y al proyecto socialista". "No estoy en política para colmar ambiciones personales. De hecho, he visto cumplidas metas que jamás ambiciones. Soy un antiguo socialista al que le gusta más el colectivo, el partido, que el culto al líder. Soy más del nosotros que del yo", ha señalado.

PRIMARIAS

Tras subrayar que él quiere unas primarias abiertas "y se van a hacer con absoluta seguridad", ha dicho que las cosas "hay que hacerlas bien". Por ello, propone que éstas se celebren después de haber celebrado el congreso de julio y una vez que se presenten a las elecciones municipales y autonómicas.

"Antes necesitamos fortalecer el partido, sus estructuras, sus cimientos. Es una cuestión de ordenar bien los tiempos y las prioridades. Sin un partido fuerte, no hay candidato o candidata que valga. ¿Qué hacemos con un candidato si no hay por debajo nada que lo sostenga?", ha destacado.

Por ello, ha asegurado que comparte "totalmente" la decisión de Pérez Rubalcaba de convocar un congreso extraordinario en julio, que, a su juicio, en absoluto "cuestiona" la celebración de primarias. Además, ha agradecido a Rubalcaba su "generosidad y sentido político, por encima de sus preferencias o apetencias personales".

Por último, el líder del PSE-EE, ha asegurado que la presidenta del Gobierno de Andalucía, Susana Díaz, "es un gran activo de este partido, un gran referente político". "Ha demostrado una capacidad enorme para coser el partido, para hacer recuperar la ilusión a la militancia, para ganar elecciones y ella tendrá mucho que decir y decidir personalmente, pero tampoco hay ningún guión fijo", ha manifestado.

Patxi López renuncia a liderar el PSE tras los malos resultados electorales