El parlamentario de IU criticó que el responsable de Industria del Gobierno del PP se había movido con sus insuficientes explicaciones “entre la exégesis de textos y la escolástica”, al tiempo que le reprochó las declaraciones efectuadas a comienzos de semana al asegurar que es ‘metafísicamente imposible’ encontrar una solución para el problema de la minería. “Usted es ministro de España y su obligación es buscar propuestas físicamente posibles y moralmente aceptables” para afrontar este conflicto.
Llamazares abrió su turno de respuesta a Soria de forma directa asegurando que “venía a esta comisión con actitud escéptica sobre lo que se nos iba a presentar, pero tras oír su intervención estoy indignado y sólo puedo pedirle que dimita”
Llamazares calificó como “justa y plenamente legal” la reivindicación de los mineros, entre otros motivos porque “tiene que ver con el futuro de las comarcas mineras y de las familias”. Al tiempo, indicó al ministro que “quien está al margen de la legalidad y en rebeldía con la Justicia es usted” porque “no acepta el plan de ayudas; quien enreda y no reconoce la representación legítima sindical es usted. Le pasa la pelota a los sindicatos para que sean ellos quienes convoquen una negociación con el pie forzado”.
El diputado por Asturias emplazó al ministro durante su comparencia –que, además de a petición del Gobierno, se debía a lo solicitud de IU que votó por unanimidad la Diputación Permanente del Congreso hace dos semanas- a convocar de inmediato la comisión de seguimiento del conflicto “porque los mineros y los empresarios quieren hablar de todo, también del Plan 2013-2018, porque se lo permite la Unión Europea y es la garantía para buscar una solución”.
Llamó la atención al representante del Gobierno por no limitarse sólo a recortar las cantidades previamente establecidas para el sector del carbón sino por estar buscando excusas y criminalizando a los interlocutores para desviar la atención. “Si tienen datos de la existencia de fraude en las empresas mineras preséntenlos a la Justicia y dejen de enredar. Tienen la obligación de de denunciar y dejen ya, por favor, de atribuir la maldad siempre a los demás”.
Gaspar Llamazares valoró que el ministro había utilizado en la comisión “la conocida estrategia de que la mejor defensa es un buen ataque, pero el suyo hoy aquí ha sido un mal ataque”. Responsabilizó a Soria de haber demostrado “sus prejuicios contra los mineros” y de “eludir sus responsabilidades”.
“Pero llega usted tarde –dijo-; los ciudadanos consideran que los mineros defienden unas reivindicaciones justas, con dignidad y han demostrado que tienen capacidad de compromiso”.
Recordó a Soria que los mineros y los empresarios sí habían sido capaces de llegar a un acuerdo “que usted no valora”. “¿Cómo viene usted aquí –preguntó- con las manos en los bolsillos? Debería haber convocado la comisión de seguimiento. Pero viene a provocarnos e indignarnos”.
En el mismo tono severo de toda su intervención, Llamazares recordó unas palabras de Mariano Rajoy en las que el presidente aseguraba que el Gobierno afronta los problemas ‘desde la verdad, la humildad y la voluntad de diálogo’. Reprochó al ministro que, por el contrario, él “no dice la verdad, no es humilde, sino prepotente y soberbio, y no quiere ningún acuerdo”.
Gaspar Llamazares recordó distintas cifras que hay sobre la mesa, entre ellas que el desmantelamiento de la minería en España tendrá un coste de 6.000 millones de euros, lo que es “una locura social y una barbaridad económica”.
En la misma línea, expuso que “lo que quiere el Gobierno es que la salida de la minería sea drástica y sea hacia el cierre”, todo ello en medio de una actitud del ministro que consideró “incendiaria, pues está haciendo chantaje a los mineros cuando aún no les ha dado un solo euro”.
