viernes. 29.03.2024

Según ha desvelado la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), la empresa IASIST, perteneciente a la multinacional UBM ha hecho público un informe denominado Análisis de resultados de los hospitales en España según su modelo de gestión “que pretende sustentar la afirmación de que modelos de gestión privada en España son mas eficientes que los de gestión pública”.

En el acto de presentación del informe, hecho por encargo del Gobierno regional, estaba presente el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fernández-Lasquetty, y su contenido, según denuncia la FADSP “se descalifica por sí solo.

A juicio de esta asociación, son varias las deficiencias que presenta el informe. En primer lugar, no incorpora los datos de los hospitales, y por otro, no son públicos, por lo que no pueden ser contrastados por la opinión pública y los investigadores que tienen que fiarse de la “buena fe” de la empresa IASIST/UBM.

La FADSP asegura que la recogida de datos se basa según dice el propio Informe de un “cuestionario” que rellenan las direcciones de los centros, y cuya credibilidad es cuestionable.

DEFICIENCIAS MÁS RELEVANTES

Tampoco informan sobre el área sanitaria media atendida, un dato fundamental a la hora de analizar el funcionamiento de un hospital ni de los índices de actividad, sino de los indicadores brutos, lo que dificulta la comparación.

La media de camas de los hospitales de gestión pública –sigue la FADSP- es de 258 y la de los hospitales con fórmulas de gestión privada 151, lo que sugiere que muchos de los primeros son hospitales de referencia (hay 3 hospitales de mas de 500 camas) y de los segundos hospitales comarcales que tienen otro hospital de referencia, hospitales esencialmente centrados en las urgencias, con 5,4 atenciones en urgencia por alta hospitalaria en los de gestión pública y 7,3 urgencias por alta en los de gestión privada, un 26% mayor, lo que parece representar un índice demasiado bajo de urgencias ingresadas y refleja una frecuentación excesiva al servicio de urgencias, por patologías leves.

No se conoce el porcentaje de derivaciones de los hospitales a los de referencia que es una clave para saber si se esta haciendo selección de riesgos, que puede influir de manera sustancial en los resultados de costes, mortalidad, complejidad, etc.

El número de altas de CMA representa el 40% de las altas en los hospitales privados frente al 26% de los públicos, lo que indica que hablamos de hospitales muy enfocados a la cirugía poco compleja ( tasa de cirugía sin ingreso12% superior a la de los centros público) y no de hospitales de Área, con un gran peso de las patologías médicas y de atención a pacientes crónicos. La proporción muy superior de las Unidades de Producción Hospitalaria (UPH) es fiel reflejo de la escasa complejidad de los centros de gestión privada, que probablemente derivan los procesos más graves que pueden disminuir su productividad y trastocar sus indicadores.

A juicio de la FADSP, llama la atención la poca coherencia de estos datos con el peso medio por GRD, que indica la complejidad de los procesos atendidos, ya que es bastante superior a la de los hospitales públicos, lo que puede reflejar que o se complican en exceso sus pacientes durante el ingreso (un 6% más según el informe), o que se infla el indicador para incrementar la tarifa del concierto (algo hipotético, difícil de demostrar en este informe somero) y/o que se derivan rápidamente enfermos complejos que se contabilizan como atendidos aunque en realidad la atención del proceso, y los costes imputables a la misma, se haya producido en el hospital al que se deriva.

323.000 euros de coste de la cama en los hospitales públicos y 318.500 euros en los de gestión privada, únicamente un 1,4% superior en los centros públicos. Sin embargo el gasto en personal por cama es de 227474 euros en los centros públicos y 210.291 en los privados, un 8% más en los hospitales públicos, lo que parece explicarse por el ahorro en personal y sueldos en enfermería en los centros privados, base fundamental de su supuesta eficiencia.

La diferencia en EM, de únicamente 0,7 días con respecto a los públicos, no parece demasiado teniendo en cuenta las características del hospital y quizás en parte esté en relación con una mayor tasa de complicaciones, relacionadas con el déficit de personal de enfermería según publicaciones en España y RU.

Con todo ello, la FADSP considera que “es un hecho inaudito el apoyo cerrado del informe a la gestión privada de la sanidad en un contexto de crisis económica producido por los grandes agujeros en las empresas privadas y la banca debido a una gestión nefasta y corrupta”.

Asimismo lamenta que”mientras que a los hospitales de gestión pública se les recortan sus presupuestos los de gestión privada los incumplen reiteradamente, lo que indica la inexactitud de sus previsiones presupuestarias o la insaciabilidad de las empresas concesionarias”.

El rescate del Hospital de Alzira, el incremento en 80 millones de euros de presupuesto a los nuevos hospitales de Madrid por parte de Esperanza Aguirre y en Cataluña, con reducción de un 12,5% del presupuesto medio para los ocho hospitales de la Generalitat (16% para el Vall d’Hebrón) y únicamente del 6,20%, para el resto de los hospitales de la XHUP y no en todos, ya que algunos hospitales privados incrementaron su presupuesto (un 12,6% el General de Catalunya, que recibió 1,9 millones de euros más que en 2010), dan fe de ello, ponen como ejemplo.

En resumen: “un informe hecho de encargo a una consultora privada, que defiende sus negocios, que tiene muchos sesgos metodológicos que ponen seriamente en entredicho su validez. Muy mal tienen que estar las cosas para que los privatizadores se gasten dinero en este tipo de propaganda”.

Lasquetty encarga un informe sobre sanidad a una consultora privada