jueves. 18.04.2024

La contratación indefinida total ha disminuido un 4,5% respecto a 2010, reduciéndose el número de asalariados indefinidos hasta los 11,2 millones. Por su parte, el número de asalariados temporales aumenta durante el segundo y tercer trimestre de 2011, respecto al mismo periodo del año anterior, situándose en un total de 3,95 millones y con una tasa de temporalidad del 26%.

Estos datos, recogidos por UGT en el Informe de Seguimiento y Evaluación de la calidad del empleo en España y actualizados al tercer trimestre de 2011, muestran el aumento del volumen de asalariados temporales y de la tasa de temporalidad durante este año, ligado a una pérdida de empleo indefinido.

El análisis constata que las medidas adoptadas a partir de la firma del Acuerdo para la Mejora del Crecimiento y el Empleo (AMCE), en 2006, tuvieron efectos positivos sobre el mercado laboral, aumentando la contratación indefinida un 40% y disminuyendo la contratación temporal. Sin embargo, a partir de 2008, esta tendencia se trunca con motivo de la recesión económica, afectando en mayor medida a las tasas de temporalidad por el desempleo entre los trabajadores que se encontraban contratados por una duración determinada.

En este sentido, en 2010 la contratación indefinida total cae respecto a 2009, y esta tendencia se mantiene en 2011. Desde la entrada en vigor del AMCE hasta 2008, se registraron casi 3 millones de contratos indefinidos iniciales, mientras que en 2011 han sido únicamente 498.403 los registrados inicialmente.

De esta forma, UGT demuestra que, como resultado de la reforma laboral impuesta por el Gobierno, durante 2010 y 2011 se produce una preocupante pérdida de empleo, tanto temporal como indefinido, comportamiento que puede acentuarse en el futuro. Por ello, el sindicato vuelve a destacar, una vez más, el fracaso de aquellas disposiciones a la hora de la consecución de los objetivos de estabilidad en el empleo y la disminución de la elevada tasa de temporalidad que se planteaban inicialmente con la aprobación de esta reforma.

UGT considera extremadamente grave que se pretenda crear empleo a base de reformas laborales, que se están mostrando totalmente ineficaces, y reclama una política económica encaminada al estímulo de la actividad productiva y a la recuperación de la economía, lo que conllevará la recuperación del empleo.

Para el sindicato, la política de ajustes y recortes ejercida hasta ahora no es la adecuada para recuperar la economía y el empleo, por lo que manifiesta la necesidad de devolver la prioridad de esta recuperación a la política económica, no a la reducción del déficit. Por ello, y para preservar además el Estado del Bienestar, el impulso de las políticas públicas se debe destinar al estímulo de la actividad económica, que es la que determinará, en definitiva, la recuperación del empleo.

Las reformas laborales "son ineficaces" para crear empleo, sostiene UGT en un informe