jueves. 25.04.2024

Los jóvenes españoles prefieren la estabilidad (en el 77% de los casos) y un ingreso fijo (70%) a la posibilidad de crear su propia empresa, según las conclusiones del Libro Blanco del Emprendedor en España, promovido por la Fundación Príncipe de Girona (FPdGi) y elaborado por los expertos de ESADE Business School.

Según las conclusiones del Libro Blanco del Emprendedor, la iniciativa emprendedora puede aprenderse en la escuela y debería potenciarse para que los jóvenes españoles puedan desarrollar competencias como la autonomía, la confianza en uno mismo y la toma de decisiones en entornos de riesgo.

El Libro Blanco también pone de manifiesto que la crisis económica es un buen momento para el emprendimiento, a pesar de que en España se llevan a cabo iniciativas emprendedoras por necesidad (59% de los casos) más que por oportunidad (41%).

El estudio indica que los jóvenes españoles no son emprendedores porque están "acomodados" y prefieren el trabajo asalariado antes que el autoempleo. Incluso la tendencia se ha incrementado del 34% en 2001 a un 52% en 2009.

Miedo al fracaso

Los principales condicionantes a la hora de tomar la decisión de no emprender en España son el miedo al fracaso y la aversión al riesgo. En el caso del primero, el informe destaca que el 45% de las personas encuestadas en España tiene miedo al fracaso, esta cifra tan solo es superada por Francia, con un 47%.

Asimismo, los españoles tampoco son proclives a tomar riesgos y tan solo el 12% asegura que es arriesgado, frente a un 39% de estadounidenses. Pero también se trata de una cuestión de falta de autoconfianza, ya que según el Libro Blanco de la iniciativa emprendedora en España, los españoles se consideran poco creativos y pensamos que lo que nos sucede está en gran medida determinado por otros o por la suerte.

Otro de los frenos a la hora de emprender en España es la mala imagen que se tiene del autoempleo. De hecho, ser emprendedor solo cuenta con un 48% de índice de popularidad, frente al 73% de Estados Unidos o el 62% de Francia.

Así, los jóvenes piensan que la sociedad valora mejor a los profesionales independientes (72%) o a los científicos y artistas (69%) que a los emprendedores o empresarios (38%). Solamente los funcionarios están peor vistos.

Los jóvenes españoles prefieren un ingreso fijo a crear su propia empresa