“Ni Su Majestad el Rey ni esta Casa acostumbran a valorar escritos u opiniones de terceros, que son responsabilidad exclusiva de sus autores, y que en el caso concreto al que se refiere Su Señoría no se compadecen con la realidad de unos hechos cuyo desarrollo y corolario final son de público conocimiento”
La Casa Real ha desmentido de forma lacónica al diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, que el rey Juan Carlos hubiera sido comprensivo con los golpistas del 23-F en las horas posteriores a la intentona de 1981. Esta circunstancia se señalaba en un cable enviado a su gobierno por el entonces embajador alemán en España, Lothar Lahn, autor de este informe tras reunirse con el rey en los días siguientes a la ocupación del Congreso. El pasado mes de enero el semanario alemán ‘Der Spiegel’ sacó el texto a la luz tras la desclasificación de documentos oficiales hecha por las autoridades germanas.
Ahora, dos meses después de la publicación de estos datos, la Casa Real ha decidido negarlos. El jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, ha remitido una carta a Gaspar Llamazares en la que, con fecha de 8 de marzo, indica textualmente que “ni Su Majestad el Rey ni esta Casa acostumbran a valorar escritos u opiniones de terceros, que son responsabilidad exclusiva de sus autores, y que en el caso concreto al que se refiere Su Señoría no se compadecen con la realidad de unos hechos cuyo desarrollo y corolario final son de público conocimiento”.
La misiva de Spottorno se inicia agradeciendo a Llamazares “su carta del pasado 23 de febrero en la que traslada determinadas preguntas que, en su condición de diputado, dirigió al Gobierno, a la vez que solicita respuesta a las mismas”.
El parlamentario de Izquierda Unida por Asturias decidió enviar directamente a la Casa Real, precisamente el día de otro aniversario del 23-F, las preguntas parlamentarias dirigidas al Gobierno sobre el papel del rey en el golpe de Estado, que semanas antes había registrado en el Congreso para su respuesta por escrito.
Llamazares tomó esta decisión después de que estas cuestiones fueran “vetadas dos veces” por la Mesa del Congreso con los votos del PP y CiU, quienes también rechazaron después el recurso de reconsideración presentado contra el primer rechazo.
Gaspar Llamazares agradece la carta remitida por la Casa Real y no entra a valorar el contenido de su respuesta. Del mismo modo, “lamenta profundamente” que su iniciativa parlamentaria con las preguntas registradas “se tenga que resolver de esta manera, con intercambios epistolares, después de que la Mesa del Congreso parece que haya decidido el negativo camino de convertir en tema tabú no sólo al 23-F sino a la propia monarquía”.
El órgano de gobierno de la Cámara Baja –que cuenta con mayoría absoluta del PP, que sólo cedió un puesto a CiU a cambio de coincidir en el sentido del voto en temas relevantes- justificó su decisión de rechazar todas las preguntas de Llamazares con el argumento de que versaban “sobre materia ajena a la competencia del Gobierno, en la medida en que se refiere a supuestas actuaciones de terceros no sometidos al control parlamentario de la Cámara”.
Sobre este punto, el parlamentario de IU sigue preguntándose si es que la Mesa de la Cámara Baja “considera que el rey es un tercero” y valora que la Casa Real es “una institución del Estado” y, como tal, no puede estar exenta del control parlamentario.
Entre las preguntas parlamentarias registradas por dos veces por Gaspar Llamazares y que luego remitió también a La Zarzuela se incluía pedir al Gobierno del PP que valorara el contenido de la nota oficial enviada por el embajador alemán en 1981. Además, reclamó conocer la ubicación de todas las grabaciones de las conversaciones telefónicas que tuvieron lugar el 23-F y el siguiente día, y si el Ejecutivo tiene intención de desclasificar todos los documentos relacionados con la intentona golpista.
