Jiménez encaja la derrota tendiendo la mano: "Tomás es desde hoy mi candidato"

Rostros de desilusión y decepción y muchas lágrimas tiñeron la noche electoral de las primarias en Madrid en el lugar en el que se dio cita el equipo de la ministra que tuvo el calor y apoyo de decenas de seguidores que la recibieron con aplausos y con gritos de “¡valiente, valiente!”.
NUEVATRIBUNA.ES / ISABEL G. CABALLERO 03.10.2010

La lluvia fue el preludio de la tristeza que inundó los rostros de las decenas de militantes que se acercaron a última hora de este domingo el Hotel Melia Princesa de Madrid. Allí se dio cita el equipo de la ministra de sanidad y los medios de comunicación para seguir el recuento de votos de las primarias con un desenlace que tiño de desconsuelo a todos los que han trabajado por la candidatura de Trinidad Jiménez, entre ellos, muchos jóvenes voluntarios que se quedaron con la amarga derrota en sus labios.

Al cierre de las urnas, en torno a las ocho de la tarde, el portavoz comparecía para hacer una primera valoración. David Lucas quiso felicitar a todos los militantes por el “ejemplo de democracia” que han dado en la campaña y por la alta participación por la que –dijo- “salga quien salga elegido, saldrá reforzado”. El concejal también quiso lanzar un mensaje de unidad asegurando que “el adversario político es el PP”, al tiempo que apeló a la “generosidad” del vencedor como un “gesto” para hacer que el PSM siga “unido”, como “una piña”, cara a las elecciones autonómicas de mayor de 2011.

Todavía no se preveía la derrota. A medida que pasaban los minutos, muchas personas se fueron acercando al hotel, esperando en el hall la llegada de Trinidad Jiménez. Dentro, ya estaban algunos dirigentes del PSOE como Pedro Zerolo. Poco después llegaba Rut Porta y Carmela Silva. Los militantes que acudieron y los miembros de las plataformas de apoyo seguían, móvil en mano, los mensajes de las distintas agrupaciones con el recuento de votos. Los resultados estaban muy igualados y todavía había esperanza de terminar la noche celebrando una victoria.

El equipo de prensa de la ministra anunció su llegada inmediata. Pero no fue hasta casi las diez de la noche cuando Trinidad Jiménez llegó acompañada del candidato a la alcaldía de Madrid, Jaime Lissavetzky. Hacía ya rato que los peores preludios se hacían realidad. Los jóvenes voluntarios miraban sus móviles. Los primeros teletipos estaban en la web: Tomás Gómez había ganado.

Los cámaras se agolparon a las puertas del hotel. La lluvia arreciaba. Trinidad Jiménez estaba apunto de llegar. David Lucas y Pedro Zerolo la recibieron a pie de calle. Allí estaba también Rafael Simancas. Los voluntarios hicieron un cordón para hacerle el paso más fácil. Los periodistas se agolparon alrededor de la ministra que se abrazó calurosamente a algunas de las personas que más estrechamente han trabajado con ella en esta campaña.

Su entrada fue sumamente emotiva. Ovacionada con gritos de “valiente, valiente”, “presidenta, presidenta” y aplausos, muchos aplausos. Los nervios de última hora empezaban a hacer mella. Sus seguidores se agolparon en la sala de prensa donde Jiménez compareció con la voz entrecortada. “Como ya he hecho en privado, quiero felicitar públicamente a Tomás Gómez, que es desde hoy mi candidato, nuestro candidato, porque así lo han dicho en las urnas los socialistas madrileños”, dijo.

"Los militantes del PSM han hablado hoy, han hablado para dar su confianza a Tomás Gómez, quiero dar las gracias a todos, de corazón, por participar y por hacer más grande, fuerte y unido al Partido Socialista de Madrid”.

“Quiero que todos sepan que cuenta con mi apoyo y mi trabajo, mis ganas y esfuerzos porque desde hoy pediré a los madrileños su voto para el 22 de mayo, con la misma intensidad y convicción que lo he pedido para mí en estas primarias”.

“Ahora más que nunca me debo a este proyecto, que es el de todos, porque me debo a todos vosotros, a vuestros anhelos de cambio de Gobierno”.

“Gracias a todos los militantes, juntos hemos hecho al Partido Socialista un partido más fuerte, más sólido, unido, que ganará las elecciones en mayo. Nunca voy a olvidar vuestro calor ni este apoyo que me estáis dando esta noche”, dijo antes de marcharse.

Sus palabras no fueron suficientes para todos aquellos que han apoyado su candidatura. En algunos, la tristeza se trastocó en rabia. ¿Qué pasará a partir de ahora? ¿Querrá Gómez tender la mano? Algunos comentaban que Gómez había ganado porque había recibido el apoyo mayoritario de dos agrupaciones: Parla y Alcorcón, la ministra había salido vencedora en “decenas de agrupaciones”, comentaban. La decepción era notable: “Hoy empieza la larga noche del socialismo madrileño”, dijo un militante en tono pesimista…