El secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, se mostró convencido de que, tras el 22-M, “la remontada es posible”, porque “el PSOE es un partido que es capaz de levantarse” y de “explicarle a nuestros votantes y al conjunto de la sociedad por qué hemos tomado ciertas decisiones que no les han gustado, pero sin las cuales tendríamos una situación económica mucho peor”.
Iglesias afirmó que “en política nada está escrito” y, así, recordó que 2 meses antes de que Zapatero ganara sus primeras elecciones había 10 puntos de distancia con el PP y “le dimos la vuelta”.
En entrevistas en la Cadena SER y en Onda Cero, Iglesias destacó que “lo que nos han pedido los votantes es que actualicemos, que pongamos a punto nuestras políticas, nuestras estrategias, de manera muy especial las relacionadas con la crisis económica, y que expliquemos mejor nuestros mensajes”. “De todo eso vamos hablar en la Conferencia Política que celebraremos en el mes de septiembre y en el Congreso ordinario que celebrará el Partido después de las elecciones generales”, apuntó.
Respecto a la reunión del Comité Federal del pasado sábado, Iglesias subrayó que no solo sirvió para impulsar ese “debate de ideas” que se concretará en la Conferencia Política, sino también para poner en marcha un proceso como es el de elección del candidato a la presidencia del Gobierno.
Iglesias negó que vaya a haber ‘dedazo’ en esa elección, ya que los socialistas han puesto en marcha un proceso de primarias, abriendo el plazo para que surjan candidaturas, “al que hay gente que ya se ha presentado”. En cualquier caso, explicó Iglesias, “tan democráticas son las primarias con un candidato como con varios” y lo que hace el PSOE es “cumplir” con el proceso que determinan sus Estatutos Federales.
Respecto a la figura de Alfredo Pérez Rubalcaba, destacó que es “un candidato muy fuerte que tiene el apoyo, no sólo de los secretarios generales, sino de las bases del Partido”. Para el Secretario de Organización, Rubalcaba es un político y un militante “extraordinariamente conocido y apreciado” por los militantes y “tanto los principales dirigentes del partido como las bases” deseaban que “diera el paso” de presentarse.
A su juicio, el vicepresidente primero se encuentra en un momento “ideal”, de “madurez” y es un político “de garantía” y “con experiencia”, que “nos da a todos mucha seguridad”.
