jueves. 28.03.2024

José Blanco tuvo hoy un lapsus al referirse a las elecciones autonómicas de Madrid asegurando que en dichos comicios “se decide quién va a ser la presidenta de la Comunidad” y todo para destacar que el 22 de mayo no se elige al presidente del Gobierno sino a alcaldes y presidentes autonómicos.

Aunque el vicesecretario general del PSOE y ministro de Fomento ha rectificado su error aclarando que "el 22-M se elige entre Esperanza Aguirre y Tomás Gómez", los periodistas que han acudido a la presentación de la campaña electoral del PSOE en la sede de Ferraz no pudieron disimular su sonrisa. Al fin y al cabo, Blanco apostó claramente por Trinidad Jiménez en las primarias del PSM y ni siquiera ocultó su mala relación con el líder de los socialistas madrileños.

Pasado el episodio, Blanco también tuvo que lidiar sobre la participación de Zapatero en la campaña en pleno debate sobre su continuidad. En este sentido aclaró que el presidente del Gobierno participará en casi una decena de actos. Según él, la estrategia socialista no implica "ocultar" a Zapatero y aseguró que su participación será "similar" a la de 2007, con seis actos en precampaña y "ocho o nueve" durante la campaña propiamente dicha.

"Emprendemos este camino sin nada de lo que avergonzarnos y mucho de lo que sentirnos orgulloso, y lo demostraremos en 10.000 actos durante el mes de abril en todo el territorio", ha proclamado.

Blanco ha subrayado que el PSOE se presenta a las elecciones "sin agenda oculta" y ha adelantado que a lo largo de la precampaña organizará una serie de comparecencias, a cargo del secretario de Ideas y Programas, Jesús Caldera, para desvelar la "agenda oculta" del PP.

En este capítulo, ha empezado por acusar al PP de pretender "acabar con la educación y la salud como servicios públicos universales y gratuitos", proponiendo que el ciudadano "pague dos veces", con los impuestos primero y mediante un copago después. Según Blanco, el PP ha matizado después esta idea porque Rajoy ha visto que no le conviene, pero "es lo que piensa" el propio líder del PP.

De este modo, ha defendido que en estos "tiempos de exigencia" lo que conviene a España es tener "más alcaldes socialistas y no menos" porque lo que está en juego son los servicios públicos esenciales, la ordenación urbana, la calidad del aire y las guarderías y los colegios.

Según Blanco, el PP "no tiene el menor interés en hablar de problemas de ciudades y pueblos" y sólo pretende que "Rajoy gane algo alguna vez". "Como nunca ha ganado nada quieren que gane ahora, aprovechando que no es candidato. Ellos pedirán el voto para Rajoy, nosotros pediremos el voto para que ganen los ciudadanos", ha dicho.

De hecho, el PSOE concurre a las elecciones con el lema "Para que gane tu ciudad", con variantes como "Para que gane la educación", "la igualdad", "tu calle", "tu barrio", u otros que incorporan en el eslogan el nombre de ciudades concretas.

Según sus datos, el PSOE presenta a estas elecciones más candidaturas que nunca, 7.600, con más de 75.000 candidatos, y las afronta "con fuerza", convencidos de que la única batalla que se pierde es la que no se da. "A partir de este momento los socialistas vamos a concentrar toda nuestra energía y toda nuestra atención en torno a  un único objetivo, acompañar y respaldar a todos nuestros candidatos", ha destacado.

Para ello, los socialistas pretenden subrayar que las elecciones son municipales y autonómicas, no generales y rehuirán "cualquier acto que no tenga que ver con el sentido último de la campaña". Blanco ha explicado así la decisión de suprimir el gran acto que se había programado para el 3 de abril con Zapatero en Madrid y, además, ha insistido en que no serán los socialistas los que desvíen la atención de lo que se pregunta en las urnas.

"Esto no es una campaña electoral, son muchas a la vez", ha remachado. Por eso, ha asegurado que la dirección federal y el Gobierno saldrán a apoyar intensamente a los candidatos, pero no a "sustituirlos".

El lapsus de José Blanco