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NUEVATRIBUNA.ES - 21.10.2010

María Teresa Fernández de la Vega les ha entregado sus respectivas carteras ante buena parte del Gobierno, numerosos dirigentes del PSOE y trabajadores de Interior y de Presidencia, con los que el nuevo vicepresidente primero ha bromeado sobre su anterior paso por la Moncloa como ministro Portavoz. "Esta casa me suena", ha dicho, a apenas unos pasos de distancia de un retrato suyo de la época. En la sala Constitucional, donde se ha celebrado la toma de posesión, cuelgan los retratos de una docena de ex ministros de la Presidencia y ex portavoces del Gobierno.

En su intervención, Alfredo Pérez Rubalcaba ha dicho ser consciente de que la acción de Gobierno tiene "una enorme importancia" y puede cambiar "en un solo día" la "vida de muchos ciudadanos", y ha añadido: "A este Gobierno le quedan muchos días para mejorar la vida de los ciudadanos". Así, ha reiterado que el objetivo del Gobierno, igual que lo era "ayer", es superar la crisis, crear empleo y explicar las reformas, de manera que de su boca se oirán "muy a menudo" las palabras "recuperación", "reforma", "austeridad" y "cohesión".

A ese "equipo" que Rubalcaba y Jáuregui formarán en Moncloa, ambos han incorporado al jefe de gabinete de Zapatero, José Enrique Serrano -con lapsus de Jáuregui incluido, que le ha mencionado como secretario general de la Presidencia--. Los tres llevan mucho tiempo trabajando juntos y su condición de "equipo" es una "garantía" que Rubalcaba ha querido poner de antemano sobre la mesa.

"DOS TARDES CON ALFREDO"

El ministro de la Presidencia ha sido eurodiputado durante el último año y medio, así que ha apuntado que tendrá que hacer una "inmersión" en política nacional, aunque nunca la ha abandonado del todo. "Espero que dos tardes, dos lecciones magistrales con Alfredo, me bastarán para ponerme al día", ha apuntado.

Ramón Jáuregui se ha referido al actual contexto de crisis como un "momento de grandes cambios" en la Historia y ha defendido que los ciudadanos reclaman "más política", "regular la codicia financiera", frenar las "expresiones de ultraderecha" en las democracias y defender el Estado del bienestar. "No podemos quedarnos quietos", ha añadido. La tarea del Gobierno, ha añadido, es trabajar con un espíritu reformista y hacer las reformas con consenso y, además, explicándolas para que "permeen" en la sociedad y de esa manera sean más eficaces.

Ambos ministros han tenido palabras de agradecimiento a Fernández de la Vega que, no obstante, no ha dirigido palabras durante el acto. La hasta ahora 'número dos' se había despedido por la mañana en una comparecencia pública ante periodistas y colaboradores que terminó con aplausos y con un ramo de rosas rojas regalado por los fotógrafos.

El equipo Rubalcaba-Jáuregui