jueves. 28.03.2024
RUBALCABA CONSULTA A LOS ‘BARONES’

División en el PSOE sobre la fórmula de elección del nuevo secretario general

Varios dirigentes del PSOE discrepan sobre la fórmula para elegir al nuevo líder del partido. Eduardo Madina advierte de que sólo contemplará la posibilidad de presentarse a la Secretaría General si se permite que esta elección se haga directamente por los militantes, y no a través de los delegados.

Eduardo Madina.

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, abrió este miércoles una ronda de consultas con los secretarios generales de las distintas federaciones del partido para estudiar la posibilidad de abrir la elección del próximo secretario general del partido al voto directo de todos los militantes, un asunto que deberá quedar resulto en los próximos días antes de la convocatoria oficial del congreso extraordinario anunciado para el próximo mes de julio.

Uno de los candidatos 'oficiosos' a estas primarias, el secretario general del Grupo Socialista, Eduardo Madina, ha anunciado que sólo valorará presentarse al congreso si se permite que en la elección participen directamente los militantes, como ocurrió en el PSdG.

Después, otras voces se han sumado a la opción de 'un militante un voto', que actualmente no contemplan los estatutos del PSOE, pero que sí están en los de las federaciones gallega, vasca y valenciana. El líder de los socialistas en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, también se ha manifestado a favor de que el congreso sea "lo más abierto y participativo posible".

Madina ha reiterado su apuesta por las elecciones primarias, pero ha dicho respetar la decisión de Rubalcaba, de optar primero por un congreso federal extraordinario para elegir al secretario general. En este escenario, lo que reclama es que el sucesor de Rubalcaba no sea elegido sólo por los delegados presentes en el congreso federal, sino previamente por todos los militantes, al estilo de lo que hizo el PSdeG con autorización de la Ejecutiva Federal, lo que se viene llamando ya un 'congreso a la gallega'.

El diputado ha insistido en que el PSOE necesita "un congreso de altura de miras", que "comprenda bien lo que está sucediendo", que vincule a los militantes del partido a sus decisiones a través de la participación y que "demuestre que ha comprendido el mensaje" que los ciudadanos le han dado en las europeas. A su juicio, de ese cónclave debe salir "un proyecto" socialista que, en sus ponencias y resoluciones, "le sirva al país para salir adelante" y que "crezca" después "hacia un proyecto posterior de primarias y hacia una victoria electoral en las siguientes elecciones generales".

Desde el PSOE andaluz, su secretario de Organización, Juan Cornejo, manifestó que no le suena mal que los militantes socialistas puedan participar en la elección de la persona que ocupará la Secretaría General del partido. En declaraciones a los periodistas, ha recordado que el PSOE-A siempre "ha apoyado la mayor participación posible" de los militantes. "Por tanto, a mí no me suena mal que los militantes puedan participar en la elección del secretario general", ha señalado.

Por su parte, la presidenta de la Junta y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, ha querido dejar claro que ni su Gobierno ni el partido en Andalucía se pueden "distraer con cuestiones internas y orgánicas", porque no se puede defraudar a los ciudadanos. La dirigente socialista ha expresado que se van a vivir una semanas intensas en el PSOE a nivel orgánico, convencida de que la convocatoria del congreso extraordinario puede a ser un momento "de cierta distracción" en las filas del partido. En su opinión, ese congreso federal tiene que ser como el que celebró el PSOE andaluz a finales de 2013: "el nuestro fue para el bien de Andalucía y el que hagamos en España tiene que ser también para el bien del país".

Entre las voces discrepantes de la fórmula “un militante, un voto”, se encuentra el expresidente del Congreso José Bono considera que "es menos importante el procedimiento que el resultado" y ha remarcado que hay que elegir "a las personas que mejor puedan conducir a la victoria" al PSOE.

"No se trata de un pase de modelos para elegir a quien pueda tener mejor discurso en un momento o en otro. En un partido político ha de valorarse y mucho quién puede conducirnos a la victoria, ganar las elecciones", ha aseverado, antes de recurrir a un símil religioso. "Imaginen que se eligiera a un obispo que no cree en Dios, pues alguien que nos lleve a la derrota sería como un obispo que no cree en Dios", ha afirmado.

El exministro y eurodiputado electo del PSOE Ramón Jáuregui también apuesta por que el próximo secretario general del PSOE lo elegirán en el Congreso de julio un millar de delegados, no todos los militantes del partido como reclaman algunos dirigentes.

"Nuestros estatutos no contemplan que voten los 250.000 militantes antes del Congreso, no está previsto así y no se va a hacer así, se va a elegir por los delegados", ha zanjado en una entrevista en 'Los Desayunos de TVE' recogida por Europa Press, preguntado por el último congreso del PSdeG, que estuvo precedido por una votación de todos los militantes para elegir a su secretario general.

División en el PSOE sobre la fórmula de elección del nuevo secretario general