viernes. 29.03.2024
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Rajoy, en la rueda de prensa en el Congreso. (Foto: Flickr PP)

“De 137 a 176, el señor Rajoy tiene un camino que recorrer, y en ese camino no puede contar con el PSOE”, advierte Sánchez

Dieciséis días después de esa ‘segunda vuelta’ electoral en España la única certeza clara es que todas las fuerzas políticas no quieren unas terceras elecciones, lo que no es ni mucho menos peccata minuta. Ahora bien, aún está por ver cómo se andará ese camino abierto para lograr la investidura y la gobernabilidad, porque el PP sigue contando con los mismos escaños con los que celebró una victoria exigua la noche del 26 de junio: 137 diputados.

Mariano Rajoy cerró este miércoles su primera ronda de contactos, una ronda de bajo nivel, para tantear el terreno, sin grandes alharacas, sin triunfalismos ni victimismos, con ese cariz que se ha autootorgado de hombre tranquilo. Y lo ha hecho con un último ‘bis a bis’ con el líder socialista Pedro Sánchez, mucho más amable en las formas aunque bastante duro en el fondo. El secretario general del PSOE celebraba aniversario, un día como hoy, hace dos años, fue elegido por la militancia para llevar las riendas de un partido que pasa por los momentos más bajos de su historia. La encrucijada a la que se enfrenta es complicada pero Sánchez quiere medir sus tiempos y sus plazos sin estar abocado a dar un paso en falso.

Rajoy: “Si Ciudadanos se abstiene, no llega”

Casi hora y media duró el encuentro entre Rajoy y Sánchez en el Congreso. Mientras los dos charlaban a puerta cerrada, Ciudadanos anunciaba su decisión de votar no en la primera investidura del líder ‘popular’ y abstenerse en la segunda, cuando no se requiere mayoría absoluta sino logrando más votos a favor que en contra para ser elegido presidente. De esta forma Rivera vuelve a marcar en rojo la casilla de salida: 137 escaños. Y eso no da, o como bien reconoció Rajoy en rueda de prensa: “Si Ciudadanos se abstiene, no llega”.

En ese escenario, Sánchez ha puesto sobre la mesa sus cartas, con un relato en cierta forma ambiguo que libre al PSOE de quedarse encajonado o imposibilitado para volver a mover ficha. El líder del PSOE, que ha calificado de “cordial” su encuentro con el presidente del Gobierno en funciones, ha reiterado lo ya conocido: el Grupo Socialista votará en contra de la investidura de Rajoy. A partir de ahí, el camino que marca Sánchez a su oponente político es el del “deber”, la “obligación” y la “responsabilidad” para intentar formar gobierno con sus “aliados potenciales”; y advierte: “de 137 a 176 [el que marca la mayoría absoluta en la Cámara baja], el señor Rajoy tiene un camino que recorrer, y en ese camino no puede contar con el PSOE”.

Si Rajoy no lograr romper el techo de cristal de sus 137 escaños no se presentará ante el Rey para someterse al pleno de investidura

El mensaje le ha quedado claro a Rajoy, es más, es lo que más claro le ha quedado tras su encuentro con Sánchez y así lo manifestó ante la prensa. El líder del PP quiere ser investido, quiere gobernar, pero avisa (añadiendo así un elemento de presión al resto de fuerzas políticas): “si tuviera la certeza total de que es imposible ser investido abriría un periodo de reflexión con los partidos”, ha dicho. Es decir, si Rajoy no lograr romper el techo de cristal de sus 137 escaños no se presentará ante el Rey para someterse al pleno de investidura.

Sánchez da a probar a Rajoy de su propia medicina

De momento, no obtendrá ningún apoyo del PSOE. El no a día de hoy es inamovible. Sánchez ha invitado a Rajoy a intentar negociar no solo con C’s, sino también con los nacionalistas catalanes y vascos. Que lo intente, que se lo trabaje, y luego se verá. El PSOE, afirmó un enigmático Sánchez, “siempre estará en la solución”. Entre líneas, el socialista advierte a Rajoy que la investidura y la gobernabilidad “van de la mano” y que si se presenta con 137 escaños a la investidura se cerrará todas las puertas (lo mismo que el PP le hizo a él). Pero, ¿y si logra más apoyos?, en ese caso, el escenario queda abierto a una eventual abstención del PSOE, o quizá, como se apunta desde algunos ámbitos socialistas, Sánchez intente formar gobierno, una posibilidad que ni confirma ni desmiente; como dice, “hay que respetar los tiempos y los plazos”.

Sánchez pone deberes a Rajoy

Recorrer el camino de los 137 escaños a los 176 (o a los de una mayoría simple de votos favorables a Rajoy) sigue estando muy verde si nos atenemos a las primeras propuestas hechas por el PP, un documento presentado a todas las fuerzas políticas con las que se ha reunido en los últimos días y que en la práctica suponen un declaración de principios, un esquema de su programa de gobierno, con asuntos, a juicio de Rajoy, de fácil consenso. De momento se desconocen las propuestas ‘ad hoc’ que pueda hacer el PP a cada unas de las fuerzas, supuestamente aliadas, que le otorguen el apoyo necesario no solo para permanecer en La Moncloa, sino para poder gobernar durante cuatro años más sacando adelante leyes, en primer término, los Presupuestos Generales del Estado. En esa disyuntiva, otro de los mensajes de Sánchez se antoja clave. El líder del PSOE aconseja a Rajoy que sepa hacer una lectura adecuada de los resultados del 26J, esa mayoría del cambio, esos 188 escaños (PSOE, C’s y Podemos) que tienen en común al menos una cosa: cambiar las políticas que ha llevado a cabo el PP y regenerar la política haciendo responsable al partido que mayores casos de corrupción ha protagonizado en los últimos tiempos.  

Rajoy: ¿Qué salida le vamos a dar a esto...?

Rajoy, como no podía ser de otro modo, también marca sus tiempos, y como ha dicho, estamos al inicio de las negociaciones. No están aún constituidas las Cortes (será el 19 de julio), no tiene ningún mandato del Rey para presentar su investidura y lo que es más importante: sigue contando solo con 137 escaños.

En conclusión, si hablamos de certezas, extraemos un puñado después de escuchar a Sánchez y Rajoy: 1º Nadie quiere unas terceras elecciones; 2º El PSOE no apoyará la investidura de Rajoy; 3º Rajoy intentará negociar para lograr apoyos y si le “bloquean”, término utilizado por él mismo, abrirá un periodo de reflexión “para ver qué salida le vamos a dar a esto”. Por su lado, C’s habla de abstención en segunda vuelta y los socialistas quieren estar “en la solución” del sodoku “sin amenazas ni chantajes”, advirtió Sánchez.

Con todo, se anuncian largas y calurosas semanas de negociaciones. 

Claves para una investidura