Pablo Iglesias e Irene Montero no han sido los únicos dirigentes de la izquierda cuestionados por su patrimonio, vacaciones o estilo de vida. Antes que ellos, otros sufrieron críticas de medios afines a la derecha con exclusivas de claro tono amarillista y sensacionalista.
TOXO Y SU CRUCERO “DE LUJO”
“Toxo preparó la huelga general en un crucero de lujo por el Báltico”. Así tituló Libertad Digital haciéndose eco de la ‘exclusiva’ de La Gaceta publicada en septiembre de 2010 sobre las vacaciones de Ignacio Fernández Toxo. El entonces secretario general de CCOO disfrutó junto a su mujer de un crucero por el Báltico en vísperas de la huelga general del 29-S. El matrimonio disfrutó de estas “lujosas vacaciones”, como las tildó la caverna, a bordo del crucero Empress de la compañía Pullmantur, un viaje calificado en Internet como uno de los más baratos de su rango.
Un año después, Periodista Digital volvía a la carga contra el dirigente sindical titulando: “Los 'lujos asiáticos' de Toxo indignan al 15-M”. El periódico no ahorró calificativos del tipo “Toxo 'se regala' unas opíparas vacaciones en Madeira antes de protestar por la reforma constitucional”.
No es de extrañar que una de las veces en que fue preguntado por este asunto Toxo respondiera airado: "¿A ti que te importa? No tengo por qué dar explicaciones de mi vida privada".
EL “BODORRIO” DE ALBERTO GARZÓN
A la derecha tampoco le gustó nada la boda de Alberto Garzón en agosto del año pasado. El digital Navarra Confidencial vendió como un escándalo el precio de 309 euros el cubierto que costó el banquete y se preguntó: “¿Hay algo malo en celebrar un banquete a 309 euros el cubierto? No, si eres un sucio lacayo capitalista, ¿pero y si eres un comunista?”.
Pero resulta que no, que no fue eso lo que costó según desmintió el propio Garzón que acusó a la “derecha cavernícola” de “inventarse” el precio del menú “tres veces por encima del real”, dijo. El coordinador general de IU también ironizó con las críticas afirmando que "lo que les molesta es que la gente de izquierda pueda ser feliz y hacer vida normal. Eso con Franco no pasaba", dijo.
CARMENA Y SU VILLA “DE LUJO”
En agosto de 2015, el turno fue para Manuela Carmena y sus también vacaciones “de lujo”. El diario La Razón publicó esos días que la recién elegida alcaldesa de Madrid pasó sus vacaciones en “una villa de 4.000 euros a la semana". El periódico describió el lugar como una “exclusiva urbanización” en Zahara de los Atunes (Cádiz) que se encuentra en “una zona elitista que frecuentan numerosas personalidades de la izquierda”.
En realidad, el alquiler costó 3.800 euros, y lo que se gastó Carmena fue poco más de 600 euros ya que la casa y los gastos se compartieron entre 7 personas. Ahora Madrid se defendió en Twitter tirando también de ironía: “Entendemos que para La Razón el escándalo es que Manuela Carmena se pague las vacaciones de su bolsillo sin que la invite ningún lobby”., y el PP no dejó pasar la oportunidad para criticar la “doble moral” de la alcaldesa, en palabras del concejal Fernando Martínez Vidal, por irse de vacaciones “cuando muchos madrileños no han podido hacerlo”.
EL BULO DEL “ROLEX” DE MÉNDEZ
Con Cándido Méndez las informaciones sobre la marca de reloj que llevaba acabaron en bulo. Intereconomía publicó en enero de 2012 a bombo y platillo que el entonces secretario general de UGT lucía en su muñeca un reloj de la marca Rolex “un reloj de lujo cuyo precio no baja de los 6.000 euros”, criticaba. Sin embargo, dicho reloj era corporativo, un regalo del sindicato italiano UIL de hace más de 25 años. "Tiene más de 25 años y pone en la esfera que es del sindicato italiano UIL. Me lo dieron en una escuela de formación que se dedica a trabajos subacuáticos", se defendió el dirigente sindical que también desmintió las informaciones que apuntaban a su habitual asistencia a restaurantes de lujo de Madrid y Valladolid. "Yo en el hotel Villa Magna no he estado nunca [...] Y a mí me gustan los callos, no la cocina cantonesa", afirmó.
LLAMAZARES NO VIVE BAJO UN PUENTE
Para sorna la que suscitó lo dicho por Gaspar Llamazares a raíz de la publicación en 2011 de su declaración de bienes en el Congreso de los Diputados. El dirigente de Izquierda Unida se puso la venda antes que la herida y nada más conocerse que tenía declarados 300.000 euros repartidos en fondos de inversión y depósitos, advirtió de que su patrimonio "también parecerá alto para más de uno", porque hay gente que piensa que los de izquierdas tienen que "ir vestidos de mono y vivir debajo de un puente".
ZAPATERO Y SU RESIDENCIA “REAL”
A José Luis Rodríguez Zapatero no dejaron de caerle críticas por sus habituales vacaciones en Lanzarote. A la isla canaria se desplazó con su familia varios años en los que fue presidente del Gobierno alojándose en la residencia de origen real La Mareta. Libertad Digital publicó que, en 2005, el dirigente socialista mandó reformar la casa lo que costó al erario público 271.000 euros. También fue puesto en la picota por gastarse 1.800 euros diarios por una suite en Tánger en el verano de 2012.
PEDRO SÁNCHEZ Y LA ‘RUTA 66’
“Gato encerrado: ¿Puede Sánchez con este sueldo permitirse tantas vacaciones?”, tituló en octubre de 2016 El Semanal Digital sobre las vacaciones del dirigente socialista días después de su dimisión como secretario general del PSOE. El diario de la derecha publicó los ingresos de Sánchez y criticó el viaje que, junto a su familia, realizó por la conocida como ‘Ruta66’ que une Los Ángeles con Chicago. El digital abundó en los gastos del viaje, que si 5.000 euros en avión, alojamiento, desplazamientos… Y eso, después de pasar por Ibiza, Mojácar, Benicasim, Vera, y ¡con su sueldo base de diputado!’. Una “tournée norteamericana” que “ha levantado ampollas” -afirmaba- en la familia socialista.
