miércoles. 17.04.2024

Camps se siente "Juan sin miedo" y desafía a Génova con su candidatura

Primeras muestras de división interna en el PPCV. El presidente provincial de Alicante, José Joaquín Ripoll no acudió a la Junta Directiva convocada tras conocerse la decisión del Supremo de reabrir la ‘causa de los trajes’. Camps afirma que es inocente y que volverá a ser candidato del PP en Valencia, mientras en Madrid surgen voces pidiendo su dimisión.
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NUEVATRIBUNA.ES / I.G.C. 12.05.2010

El presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, afirmó en su comparecencia ante los medios de comunicación tras presidir la Junta directiva regional del PPCV, que es "absolutamente inocente" y aseguró que "nadie en el planeta tierra da lecciones de nada", ni de "honorabilidad y honradez" a este partido, del que será el candidato en las próximas elecciones autonómicas.

Camps -que dijo sentirse "como Juan sin miedo"- manifestó que habló por la tarde con el presidente nacional de su partido, Mariano Rajoy, quien le trasladó su apoyo "incondicional" y afirmó que es "falso de toda falsedad la circunstancia" por la que el Supremo ha ordenado reabrir su causa. En esta línea, mantuvo que es "mentira" lo que se dice en este proceso, que aseguró que es "de risa" y criticó que "aparecen" documentos "interesados y manipulados" con la intención de "sembrar dudas" sobre la honorabilidad de la administración autonómica y del PP, y anunció que presentarán pruebas exculpatorias "clarísimas".

Camps se mostró convencido de que será el candidato a la presidencia del Gobierno valenciano en las próximas elecciones autonómicas "como ha dicho la dirección nacional del partido y como de manera clara y manifiesta ha respaldado el partido". Asimismo, avanzó que ha propuesto a los miembros de la Junta Directiva "ponerse ya en campaña" y "trabajar todos los días con la cara bien alta y sin ningún tipo de complejo". Al respecto explicó que había pedido al secretario general (lo que fue refrendado por la Junta Directiva) que convoque ya el Comité Ejecutivo Regional y proponga un Comité de Campaña. Igualmente, anunció que el próximo 26 de mayo está previsto "un gran acto para celebrar el tercer aniversario de la victoria electoral de 2007".

Preguntado por cuánto va a tardar en convocar elecciones, Camps comentó que esa es una cuestión que le corresponde a él como presidente de la Generalitat y agregó que, aunque "en principio" tiene un mandato de cuatro años, se trata de una decisión que le corresponde a él tomarla "cuando crea oportuno".

En esta línea, dijo que "el presidente de una comunidad se plantea todo aquello que le corresponde plantearse y estas cuestiones se plantean porque corresponden a una decisión de impulso político de la Comunitat Valenciana". "Hoy no hemos hablado de eso pero, lógicamente, es una potestad que me corresponde dada por los valencianos y que si tengo que ejercerla la ejerceré", remarcó. Interrogado de nuevo por si descarta avanzar los comicios, el 'president' contestó: "no descarto nada y eso es lo importante". A Camps también se le planteó la posibilidad de introducir cambios en su gobierno, algo en lo que, según señaló, no ha pensado porque tiene una "confianza plena" en el actual Consell.

PLANTÓN DEL PP ALICANTINO

La firmeza de Camps contrastó con el hecho de que los populares alicantinos no acudieron a la Junta Directiva convocada de manera extraordinaria tras conocerse la decisión del Supremo de reabrir la ‘causa de los trajes’ archivada en su momento por el TSJV. El plantón del presidente provincial del PP de Alicante, José María Ripoll se conocía de antemano en Génova que asiste con cierta preocupación a la situación que a partir de ahora se le presenta a Camps.

Éste, acompañado por la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, acudió al filo de las seis de la tarde a la sede de su partido para recibir el respaldo de los principales dirigentes del PP valenciano, respaldo que no secundaron los alicantinos evidenciando así las primeras divisiones internas generadas a raíz del ‘caso Camps’. Se trataba de la primera aparición pública del presidente de la Comunidad valenciana tras el anuncio del Alto Tribunal y fue recibido con aplausos que se prolongaron unos minutos de todos los asistentes puestos en pie.

Mostrar la foto de la unidad y apoyo a Camps y el cierre de filas fue la consigna que desde primeras horas se manifestó en declaraciones de varios dirigentes del PP. El presidente del partido en Valencia, Alfonso Rus, aseguró que la reunión de la cúpula del PPCV se había convocado con la intención de mostrar “un apoyo sin fisuras” al presidente de la Generalitat. De manera similar se manifestó el portavoz del PP en las Cortes Valencianas, Rafael Blasco, quien expresó en nombre del grupo parlamentario popular el respaldo “absoluto y categórico” a su jefe de filas. El diputado también dijo tener la firme “convicción” de que la causa reabierta por el Supremo volverá a quedar archivada por el TSJV y acusó a la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega de haber dado la orden a la Fiscalía para recurrir la misma, “en lo que es un ejemplo de clara intromisión y de falta de respeto por la división de poderes que tiene que presidir cualquier Estado de Derecho”, dijo. El argumento coincide con la huída hacia delante que se lleva a cabo desde Madrid donde el PP ha anunciado que se querellará contra el autor del informe que evidencia la presunta financiación ilegal del PP en el marco de la trama de corrupción Gürtel.

”PREOCUPACIÓN” EN GÉNOVA 13

El apoyo a Camps en Valencia, a excepción de Ripoll que evitó la foto de unidad, contrastó con el silencio de Génova. Ningún dirigente del partido en Madrid, incluido Rajoy, quisieron hacer este miércoles comentario alguno al término del pleno en el Congreso de los Diputados. Tan sólo el valenciano Esteban González Pons salía al paso de la tromba de preguntas de los periodistas alegando que Camps “sigue sin estar imputado” y que por eso sigue teniendo “todo” el respaldo de la dirección nacional. Un respaldo que no se ha traducido hasta el momento en manifestaciones públicas ya que Génova entiende que el que tiene ahora que dar explicaciones es el presidente valenciano: "Paco Camps es el que tiene que dar ahora la cara. Es él el que tiene que asumir esta responsabilidad", dicen fuentes populares.

Las mismas fuentes del partido en Madrid muestran en privado su “preocupación” por que este caso se convierta en otro nuevo “infierno” como el vivido por el ex tesorero Luis Bárcenas que copó durante meses el foco de atención de los medios. Algunos dirigentes apuntan ya la necesidad de que Camps se marche para no hacer más daño al partido dado que los sondeos les son favorables en Valencia aunque fuera otro el candidato en las elecciones de 2011. Por ello, entienden que el presidente de la Generalitat debería facilitar la tarea y dimitir sin necesidad de que Rajoy fuerce el cese.

A falta de esas explicaciones, a Camps le espera un vía crucis y no sólo por la posibilidad de que pueda llegar a sentarse en el banquillo de los acusados, lo que determinará en buena medida que repita o no como candidato del PP en Valencia, sino por el hecho de que todos los partidos de la oposición y buena parte de la sociedad civil están pidiendo su dimisión. A su llegada a la sede del PP valenciano le esperaba un grupo de manifestantes de la Plataforma Anticorrupción portando pancartas con el lema No a la corrupció, Camps dimissió. El Partido Socialista de Valencia también le ha exigido que dimita y que convoque elecciones anticipadas. Fuentes socialistas aseguran que “ya no se trata sólo de tres trajes” sino de una presunta trama de financiación ilegal del PP en la Comunidad.

Camps se siente "Juan sin miedo" y desafía a Génova con su candidatura