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NUEVATRIBUNA.ES - 16.03.2009

Impunidad absoluta para los diputados del Grupo Popular que están implicados en la trama de corrupción conocida como ‘caso Gürtel’ y que a día de hoy no han abandonado su escaño como diputados autonómicos. Si bien es evidente que el PP no piensa darse por aludido hasta conseguir machacar al PSOE en las europeas (único objetivo por el que trabajan a desuello en estos momentos), escandaliza ver que tres cargos públicos se rían literalmente del acta de la que son servidores.

La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) recibió este lunes las cinco cajas procedentes del Juzgado Central número 5 de la Audiencia Nacional, cuyo titular es el juez Baltasar Garzón, relacionadas con el "caso Gürtel". El magistrado acordó enviar parte del caso al TSJM a petición de la Fiscalía Anticorrupción y ante la existencia de indicios de delito en la actuación de tres aforados. Se trata de los diputados autonómicos Alberto López Viejo, ex consejero de Deportes del Gobierno regional; Alfonso Bosch Tejedor y Benjamín Martín Vasco.

En un auto del día cinco, el magistrado relata que López Viejo hizo operaciones con la trama presuntamente dirigida por Francisco Correa por un valor de 563.000 euros, Bosch por 250.572 y Martín Vasco por un importe de 437.176, lo que ascendería a 1.250.728 euros. Garzón considera que los tres aforados podrían haber cometido los delitos de tráfico de influencias, blanqueo de capitales, fraude fiscal, cohecho y asociación ilícita.

Alberto López Viejo dimitió como consejero de Deportes pero no abandonó su escaño en la Asamblea de Madrid. La imagen de soledad y de gesto taciturno, alejado de la bancada del Gobierno, no es suficiente para depurar responsabilidades políticas. Si dejó el cargo público de consejero por su implicación en la trama liderada por Francisco Correa, con mucha más razón debe renunciar al cargo que ocupa como representante de la ciudadanía en el Parlamento. Según Garzón, el ex consejero de Deportes sería la persona "que daba las instrucciones para que se facturara adecuadamente a fin de ocultar las irregularidades en cada acto, distribución que siempre se hacía sin pasar de los 12.000 euros".

Benjamín Martín Vasco llegó a presidir la trama de los espías, responsabilidad que tuvo que abandonar cuando su nombre salió relacionado con Gürtel. En la actualidad se mantiene en un segundo plano pero siempre a la vera de Esperanza Aguirre. Garzón asegura que se dedica a la intermediación para conseguir adjudicaciones de proyectos urbanísticos para la empresa Martinsa en el Ayuntamiento de Arganda del Rey, sociedad que había pagado comisiones a Correa para ello.

Por su parte, Alfonso Bosch Tejedor ha evitado en las últimas semanas hacer declaraciones a los medios. El juez apunta que recibió pagos de Correa a cambio de obtener la adjudicación del proyecto de construcción de la ciudad deportiva de Boadilla a la empresa Hispánica, así como la de unos locales a Rústicas MBS, propiedad del imputado José Ramón Blanco Balín, ex vicepresidente de Repsol YPF.

Bosch Tejedor, López Viejo y Martín Vasco, siguen aferrados a su escaño