La secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, ha asegurado que el Gobierno pone por delante que patronal y sindicatos logren cerrar la reforma de la negociación colectiva a que se produzca en un momento determinado, con lo que, mientras esto ocurra, "el día es lo de menos".
En declaraciones a los medios tras la presentación de un informe sobre responsabilidad social corporativa en las empresas del Ibex 35 en la sede de UGT, Rodríguez se mostró de este modo abierta a que el acuerdo pueda concretarse más allá del próximo día 24 de marzo, en que el Gobierno tiene previsto presentar ante el Consejo de Europa sus compromisos en el marco del Pacto por el Euro.
"El escenario que todavía contempla el Gobierno es que habrá un acuerdo y si lo hay lo de menos si se ha producido el 18 ó el 25 de marzo", afirmó.
En la misma línea, explicó que "los agentes sociales creen que ya hay territorio para un acuerdo posible y desde el Gobierno siempre se ha pensado que es mejor un acuerdo que poner un día antes o después la fecha del acuerdo". "Ellos son los que mejor conocen los defectos de la negociación colectiva y los que sabrán corregirlos", señaló.
EL MODELO ESPAÑOL YA VINCULA SALARIOS Y PRODUCTIVIDAD
Por otro lado, preguntada por el compromiso expresado por carta por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al presente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, de ajustar los salarios a la productividad, Rodríguez indicó que en la misiva también se aclaraba que esta materia ha de tratarse en el ámbito de la negociación colectiva nacional.
Además, defendió que "una parte importante" de los salarios en España ya se vincula a la productividad, y que "todos los países de la OCDE, incluida Alemania" contempla también la variable de la inflación en su modelo de formación de salarios.
La diferencia con España, ahondó la secretaria de Estado de Empleo, es que en muchos de estos países no han existido las mismas presiones inflacionistas y que, por el contrario, se han producido en los últimos años crecimientos "significativos" de la productividad.
Por último, recordó que en tiempos de crisis aumentan los índices de productividad en las empresas y, en este sentido, planteó que "si hoy la única referencia para los salarios fuera la productividad, los sueldos tendrían que subir mucho más" que en tiempos de bonanza.
