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22 de febrero de 2010, 8:12
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 20.2.2010
Cayo Lara ha dicho que su formación no descarta "bailar" con el PSOE en 2012, siempre que se produzca un acuerdo en lo programático, algo que sería imposible con el PP "porque no nos gusta ni su letra ni su música". Sus palabras han sido: "Con el PSOE podemos bailar juntos o separados, pero si es juntos tiene que ser a raíz lo programático y en función de lo que han respaldado nuestros votantes, nunca porque nos guste el cha cha chá".
Lara, que ha participado en un foro por el desarrollo sostenible y la democracia económica en Sevilla, sostiene que la economía es la "madre de todas las batallas" para su formación y se muestra favorable a seguir negociando hasta que IU logre el 51 por ciento de los votos en España, lo que le permitiría llevar a la práctica sus propuestas. "La flecha apunta hacia arriba", afirma el coordinador, que alerta sobre las maniobras de diferentes sectores para frenar ese crecimiento.
De cara a la reunión del jueves sobre el pacto económico que propone el Gobierno, Cayo Lara asegura que su formación asistirá con "ánimo constructivo" para plantear propuestas encaminadas a una salida de la crisis "por la izquierda". Eso significa, en primer lugar, que el pacto no puede conllevar recortes de los derechos de los trabajadores, "sino que tiene que generar esperanza a quienes ya la han perdido o están a punto de perderla".
Entre las propuestas que IU pondrá sobre la mesa, figuran la lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida; la puesta en marcha de una reforma fiscal progresiva, encaminada a que paguen más quienes más tienen; la creación de un plan de choque contra el desempleo; el aumento de la inversión pública y de los créditos a las pymes, y la intervención pública en materia de vivienda.
No obstante, Lara teme que el socio preferente del Gobierno sea CiU que, junto al Fondo Monetario Internacional, la CEOE y el PP, se inclina por "recetas" que tienen como ingredientes la reducción de los salarios y de las cotizaciones a la Seguridad Social, el abaratamiento del despido, la reducción de la fiscalidad de las empresas y del gasto público, así como el retraso de la edad de la jubilación a los 67 años, "sin que haya ningún elemento que lo justifique".
Cayo Lara ha dicho que su formación no descarta "bailar" con el PSOE en 2012, siempre que se produzca un acuerdo en lo programático, algo que sería imposible con el PP "porque no nos gusta ni su letra ni su música". Sus palabras han sido: "Con el PSOE podemos bailar juntos o separados, pero si es juntos tiene que ser a raíz lo programático y en función de lo que han respaldado nuestros votantes, nunca porque nos guste el cha cha chá".
Lara, que ha participado en un foro por el desarrollo sostenible y la democracia económica en Sevilla, sostiene que la economía es la "madre de todas las batallas" para su formación y se muestra favorable a seguir negociando hasta que IU logre el 51 por ciento de los votos en España, lo que le permitiría llevar a la práctica sus propuestas. "La flecha apunta hacia arriba", afirma el coordinador, que alerta sobre las maniobras de diferentes sectores para frenar ese crecimiento.
De cara a la reunión del jueves sobre el pacto económico que propone el Gobierno, Cayo Lara asegura que su formación asistirá con "ánimo constructivo" para plantear propuestas encaminadas a una salida de la crisis "por la izquierda". Eso significa, en primer lugar, que el pacto no puede conllevar recortes de los derechos de los trabajadores, "sino que tiene que generar esperanza a quienes ya la han perdido o están a punto de perderla".
Entre las propuestas que IU pondrá sobre la mesa, figuran la lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida; la puesta en marcha de una reforma fiscal progresiva, encaminada a que paguen más quienes más tienen; la creación de un plan de choque contra el desempleo; el aumento de la inversión pública y de los créditos a las pymes, y la intervención pública en materia de vivienda.
No obstante, Lara teme que el socio preferente del Gobierno sea CiU que, junto al Fondo Monetario Internacional, la CEOE y el PP, se inclina por "recetas" que tienen como ingredientes la reducción de los salarios y de las cotizaciones a la Seguridad Social, el abaratamiento del despido, la reducción de la fiscalidad de las empresas y del gasto público, así como el retraso de la edad de la jubilación a los 67 años, "sin que haya ningún elemento que lo justifique".