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Marcelino Camacho

Fundador y primer secretario general de Comisiones Obreras (CC.OO.) entre 1976 y 1987 y diputado comunista por Madrid entre 1977 y 1981, de él ha quedado una frase para la historia, la que pronunció tras pasar nueve años en la cárcel de Carabanchel: "Ni nos doblaron, ni nos doblegaron, ni nos van a domesticar".
NUEVATRIBUNA.ES - 27.10.2010

Marcelino Camacho Abad había nacido en Osma la Rasa, Soria, en 1918. Se crió en el pueblo aragonés de Ariza, donde su padre era ferroviario. En 1935 ingresó en el Partido Comunista de España (PCE), compromiso que le llevó a luchar en el bando republicano durante la Guerra Civil de 1936-39. Tras la derrota de éste, fue juzgado y condenado en represalia por el bando vencedor: fue encarcelado y, más tarde, asignado a un batallón de trabajos forzados en Tánger. Se evadió de un campo de concentración franquista y pidió asilo político en la Argelia francesa.

Regresó a España en 1957 gracias a un indulto y empezó a desempeñar su labor de impulsor de CCOO desde su profesión de obrero metalúrgico en Perkins Hispania, donde fue elegido representante de los trabajadores de su empresa. Por sus actividades sindicales y políticas fue encarcelado en 1967, pasando nueve años en la cárcel de Carabanchel. A la salida de la prisión, el líder soriano pronunció una frase que fue casi como una premonición: "ni nos doblaron, ni nos doblegaron, ni nos van a domesticar". Salió indultado tras el famoso Proceso 1001, en el que la dictadura juzgó a los principales dirigentes de CC.OO. a finales de 1973.

En 1976 las Comisiones Obreras se constituyó en confederación sindical y Marcelino Camacho fue elegido secretario general. En ese momento ya era miembro del Comité Central del PCE. Fue elegido diputado por Madrid en las elecciones constituyentes de 1977 y reelegido en las elecciones de 1979. Dimitió como diputado por desacuerdo con las normas laborales que aprobó el Parlamento con el apoyo del PCE.

Dirigió CCOO hasta 1987, siendo reelegido por abrumadora mayoría en los cuatro primeros congreso del sindicato. En este periodo Comisiones se convirtió en la primera central sindical española y le convocó la primera huelga general al gobierno de Felipe González en 1985. Además, tuvo una destacada presencia en las movilizaciones contra la OTAN de 1986 y en las estudiantiles del curso 86/87. En 1987 pasó a ocupar el cargo honorífico de Presidente, al ser sustituido en el cargo de secretario general por Antonio Gutiérrez. Desde incluso antes del 5º Congreso (1991) mantuvo enfrentamientos con la dirección encabezada por Gutiérrez (favorable al pacto social o a la disolución del PCE en Izquierda Unida), lo que culminó con su dimisión como Presidente en 1995 al estar en desacuerdo por el alejamiento de la dirección de CCOO del PCE y su continuo giro a la derecha. En el 6º Congreso (1996) el sector mayoritario oficialista votó en contra de la candidatura a Presidente para el que el Sector Crítico había propuesto a Marcelino Camacho, por 366 votos a favor, 571 en contra, 43 abstenciones, 12 en blanco y 3 nulos.

Hasta el último momento siguió militando en el PCE y siendo miembro de su Comité Federal. Así mismo era afiliado de IU y conservaba el carnet nº 1 de miembro de CCOO. En 1990 publicó sus memorias, "Confieso que he luchado", prologadas por Manuel Vázquez Montalbán.

Marcelino Camacho