La Organización Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) ha iniciado acciones judiciales contra el ex director general de la Agencia Tributaria e inspector en excedencia, Ignacio Ruiz Jarabo, ante los "ataques" que contra el honor, la intimidad y la imagen transmite de este colectivo en su libro Estado Fiscal y Democracia durante la campaña de promoción del mismo.
Los inspectores de Hacienda consideran que afirmaciones como "en la inspección se funciona con prácticas parecidas a la extorsión" o "la inspección es muchas veces un ejército de Pancho Villa", y algunas otras que Ruiz Jarabo vierte en su libro y en sus intervenciones en los medios de comunicación, no sólo dan una visión "falaz y errónea" del colectivo, sino que "socavan la confianza" de los ciudadanos en las instituciones y son un "ataque intolerable" al prestigio y profesionalidad del mismo.
Por todo ello, la Organización Profesional de Inspectores de Hacienda ha iniciado acciones civiles por violación del derecho al honor y a la propia imagen de sus asociados y exigirá las correspondientes responsabilidades a Ignacio Ruiz Jarabo ante los tribunales de Justicia, al que acusa de actuar únicamente por "motivos promocionales y afán de notoriedad".
Además, subrayan que ante las "reiteradas negativas" a rectificar esas opiniones y afirmaciones, tal como se le ha instado desde la Organización Profesional de Inspectores de Hacienda, se ha procedido a la expulsión de la asociación del que fuera responsable de la Agencia Tributaria de 1998 a 2001, y que en su condición de ex inspector de Hacienda aún formaba parte de la asociación.
LA PRIMERA EXPULSIÓN DE LA ASOCIACIÓN
Según destacan los inspectores, se trata del primer caso de expulsión de la Organización de un inspector por "actitud lesiva para la imagen del cuerpo de inspectores de Hacienda", de acuerdo con los estatutos de la organización.
El colectivo indica que Ignacio Ruiz Jarabo ha insistido en estos últimos meses en acusar a los inspectores de Hacienda "de realizar prácticas delictivas", en particular de extorsión, trasmitiendo así una imagen de los inspectores no sólo contraria a la realidad, sino que daña "seriamente y de forma difícilmente reparable" la reputación de este colectivo de profesionales de la Agencia Tributaria.
"Utilizando las altas responsabilidades que ha ejercido en la AEAT, el ex director de la Agencia Tributaria proyecta una visión falaz, errónea y sesgada de lo que es y supone el trabajo inspector, lo que denota un profundo desconocimiento de la labor inspectora y puede poner de manifiesto dejación de su obligación de denuncia como responsable de la institución, en aquel momento en que tuvo conocimiento de los hechos que refleja en su libro", subraya la Organización de Inspectores.
MÁS INTOLERABLES LAS CRÍTICAS POR LA CRISIS
Para el colectivo, en momentos como los actuales, marcados por la "dura" crisis económica, se hace, si cabe, "más intolerable" que alguien que tuvo altas responsabilidades en la Agencia Tributaria relate ahora en su libro lo que debiera haber denunciado en momentos anteriores, de haber tenido conocimiento de ello, y ponga así en entredicho la labor ética y profesional del colectivo en su conjunto.
Por todo ello, la Organización de Inspectores de Hacienda del Estado insiste en reiterar ante la sociedad que como servidores públicos "el único afán que mueve a los miembros del colectivo en su tarea diaria es el cumplimiento de las normas, el trato justo y respetuoso a los derechos de los contribuyentes para que sus actuaciones estén regidas siempre por criterios no arbitrarios, con sometimiento pleno a la ley y al Derecho como exige la Constitución Española".
