jueves. 25.04.2024

Las empresas utilizan "grandes trucos" para ocultar su mala gestión social

LUIS MARTÍNEZ
Informes "escandalosos". Autobombo. Letra pequeña. E índices incomprensibles, tras los cuales se ocultan las muertes en el tajo. Así es la responsabilidad social en algunas de las más importantes empresas españolas, según denuncia CCOO.
> "Nuevo frente sindical por la RSE"
NUEVATRIBUNA.ES - 27.05.2009

Responsabilidad Social Corporativa o Empresarial (RSE). Tras este kilométrico concepto, se esconde, en realidad, algo bien simple. La especial atención que las empresas ponen en potenciar la calidad de vida de sus trabajadores, y de sus procesos productivos. Una especie de código de buen gobierno empresarial. Voluntario. Pero imprescindible para toda gran empresa.

La responsabilidad social empresarial (RSE) es un concepto procedente del mundo empresarial. Por este motivo, las empresas aceptan elaborar estos estudios de buen grado. Y quizás también por eso los sindicatos han tardado en adoptarlo como algo suyo. Aunque, desde Comisiones Obreras, se pretende ahora corregir esta carencia. Según el sindicato, la crisis, causada precisamente por la "irresponsabilidad" de algunas empresas y reguladores, es el momento perfecto para potenciar esa responsabilidad en el ámbito empresarial, según afirma la directora del Observatorio de Responsabilidad Social Empresarial de la Fundación Primero de Mayo, Laura Pinyol Vidal.

A partir de esta idea, la Fundación Sindical de Estudios ha sometido a examen a las empresas del Ibex-35 a través de sus memorias anuales de Responsabilidad Social Empresarial (RSE). A partir de estos balances, la empresa Astime, por encargo de CCOO, ha elaborado un informe donde se analiza qué se esconde en realidad trás esa montaña de papel.

AUTOBOMBO Y AUDITORES "PELOTAS"

En primer lugar, la Fundación señala que las empresas españolas se autocalifican con el grado más alto en materia de RSE. Para los autores de este estudio, esto hace pensar en una "muy baja exigencia" por parte de las empresas. Y en un interés "relativo" de mejora respecto al cumplimiento de los criterios sociales en el gobierno de la empresa.

Por otro lado, aunque todas las memorias han sido verificadas por auditores independientes, tras analizar estos informes externos, la Fundación concluye que los auditores y consultores "dicen a sus clientes lo que quieren oir". Además, los auditores y consultores no realizan un trabajo muy exhaustivo en el análisis de las memorias presentadas por las empresas, concluye el estudio.

PUBLICIDAD ESCANDALOSA

Respecto al contenido, CCOO es tajante cuando afirma que las memorias son "documentos de publicidad de las empresas". El informe detalla incluso que algunas se dirigen "de forma escandalosa", como en el caso de Iberdrola Renovables, "a sus accionistas".

En cuanto a la forma, el documento determina que las empresas utilizan "grandes palabras" y conceptos "vacíos" de contenido, al menos en muchos casos, para trasladar datos, no siempre disponibles.

Otro aspecto "sorprendente", asegura el informe, es que "casi todas" las empresas españolas del Ibex 35 señalan de forma "muy destacada" en sus memorias como una buena práctica el mero cumplimiento de la ley.

POCO FRECUENTE SINCERIDAD

"A veces sorprende encontrar algunos datos que perjudican a la empresa y que sin embargo se ofrecen con sinceridad (por ejemplo, el número de reclamaciones recibidas por Telefónica), pero esto es poco frecuente", añaden los autores del estudio.

Al llegar a temas tan sensibles como los accidentes laborales, la sinceridad brilla por su ausencia. Así, cuando se habla de siniestralidad, las empresas utilizan índices "difíciles de interpretar", afirman los expertos de este estudio, con la intención de "ocultar la gravedad o incidencia" de los accidentes en el trabajo, y llegan a ofrecer valores "que no representan de forma clara el problema", advierten, como índices de difícil comprensión.

"Los aspectos negativos se minimizan frente a los positivos, en algunos casos con soluciones tan burdas como la utilización de letras de distintos tamaños", añaden los autores de este estudio.

"Las empresas deberían elegir entre reforzar su imagen a través de la autopublicidad, o utilizar la sinceridad como principal valor de marca y la comparación de indicadores veraces y exigentes que permitan demostrar como año tras año han ido mejorando", concluye el estudio.

Las empresas utilizan "grandes trucos" para ocultar su mala gestión social