La crisis disuelve el diálogo social

Empresarios y sindicatos se desmarcan del nuevo plan de medidas urgentes para el empleo.
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LUIS MARTÍNEZ - 2.3.2009

No pudo ser. Los sindicatos, y sobre todo los empresarios, se desmarcaron hoy lunes del nuevo plan con el que el Gobierno pretende frenar la destrucción de empleo en España a causa de la criris. “Ya ha habido suficiente debate”, dijo Corbacho al referirse a la falta de acuerdo entre los agentes que participan en la mesa de Diálogo Social, tras su negativa a estampar su firma en el documento con medidas destinadas a proteger el empleo y dotar de liquidez a las empresas, que costará 1.500 millones de euros.

“El Gobierno entiende que ha ya habido suficiente debate y por eso no sometemos estas medidas al acuerdo”, afirmó el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, quien descartó una posible reforma laboral, de momento, añadió, para disgusto de los empresarios que han calificado el plan del Gobierno de poco ambicioso.

Por su parte los sindicatos criticaron algunas de las medidas que piensa adoptar el Gobierno, sobre todo las relativas a bonificar las cuotas de las empresas a la Seguridad Social. “Con las bonificaciones no se crea empleo, sólo se reducen los costes de las empresas", denunció el secretario de Acción Sindical de CC.OO., Ramón Górriz.

En general, su homólogo de UGT, Toni Ferrer, consideró que las medidas que aprobará el Ejecutivo van en la buena dirección, aunque subrayó que deberían perfeccionarse en el diálogo social durante las próximas semanas. No obstante, no parece que esto vaya a suceder, porque el Gobierno ha dado por finalizado el debate en torno a estas cuestiones.

Los dos dirigentes sindicales, en un claro mensaje a la patronal, recharazon que la solución a la crisis esté en una reforma laboral y en el abaratamiento del despido.

EL PARO SE CONVERTIRÁ EN UNA BONIFICACIÓN

Celestino Corbacho compareció para explicar las iniciativas de las que el Gobierno piensa informar en el Consejo de Ministros del próximo viernes, cuyo coste ronda los 1.500 millones de euros y que entrarán en vigor dentro de "un par de meses".

Corbacho explicó que algunas de estas medidas necesitarán instrumentación legal, vía decreto-ley y con tramitación de urgencia, por lo que deberán ser convalidadas en el Parlamento.

Dentro de las siete medidas que aprobará el Ejecutivo el próximo viernes, Corbacho destacó la reposición de prestaciones por paro cuando se produzcan ERE temporales y subrayó que el periodo máximo de reposición de la prestación por extinción será de 120 días, frente a los 90 en el caso de los expedientes por suspensión.

Esta medida es válida para los ERE presentados entre el 1 de octubre de 2008 y el 31 de diciembre de 2009, aunque Corbacho precisó que a finales de este año se podría prorrogar por un año máximo, dependiendo de las circunstancias.

Otra de las propuestas es que los empresarios autorizados para ERE temporales tendrán derecho a una bonificación del 50 por ciento de la cuota a la Seguridad Social, hasta seis meses máximo, si se comprometen a mantener el empleo de los trabajadores un año después de haber terminado la suspensión del contrato.

Otra medida es que la empresa que contrate a un trabajador en paro podrá bonificarse el cien por cien de la cuota empresarial de la Seguridad Social de dicho trabajador hasta un máximo equivalente del importe que tuviera pendiente de percibir a la entrada en vigor del contrato.

El Gobierno también aumentará la cuantía en la bonificación de los contratos a tiempo parcial (el porcentaje de bonificación será un 30 por ciento más que la jornada pactada en el contrato).

El ministro también se refirió a la nueva línea del ICO para mejorar la financiación de la mediana empresa, que todavía está sin cuantificar.