Con esta subasta, el Tesoro se ha quedado en la parte alta del rango, ya que esperaba captar entre 1.500 y 2.500 millones. La demanda, por su parte, casi ha triplicado la cantidad finalmente adjudicada al superar los 7.300 millones.
En concreto, el Tesoro ha colocado 371,76 millones de los 1.661,80 millones solicitados por los inversores en obligaciones con cupón 4,40% y vencimiento a 31 de enero de 2015. Así, las peticiones han superado en 4,5 veces la cantidad adjudicada, cifra mayor a la de la última emisión (2,4 veces).
En este papel, el organismo ha tenido que elevar el interés medio al 4,375% desde el 2,890% registrado en la subasta anterior. El interés marginal, por su parte, se ha situado en el 4,421% frente al 2,960%.
Además, el organismo ha colocado 1.097,60 millones de los 2.616,60 millones pedidos en bonos a cuatro años con cupón 3,25% y vencimiento a 30 de abril de 2016. En este caso, el ratio de cobertura ha bajado desde el 4,4% de la anterior subasta hasta el 2,4% actual.
El tipo medio de este papel ha escalado más de punto y medio y se ha situado en el 5,106% frente al 3,374% de la última emisión. El interés marginal, por su parte, ha subido al 5,130% desde el 3,428% anterior.
Finalmente, el Tesoro ha colocado 1.024,02 millones de los 3.087,03 millones solicitados por el mercado en obligaciones con cupón 4,00% y vida hasta el 30 de julio de 2015. De esta forma, el ratio de cobertura se ha mantenido prácticamente igual que en la última emisión puesto que las peticiones han superado en 3 veces lo adjudicado (2,9 veces en la anterior ocasión).
En las obligaciones a julio de 2015, el organismo ha tenido que subir la rentabilidad media hasta el 4,876% frente al 4,037% anterior, mientras que el interés marginal ha repuntado hasta el 4,917% desde el 4,069% anterior.
La prima de riesgo, tras superar ayer la barrera de los 500 puntos básicos, se situaba este jueves en 485 puntos básicos instantes después de la apertura de las bolsas europeas y se aproximaba a los 490 puntos al cierre de la emisión.
VUELVE LA DESCONFIANZA
La inestabilidad política de Grecia y las dudas sobre la banca española han provocado un nuevo rebrote de la desconfianza que ha llevado al Gobierno a hacer numerosos llamamientos a la calma.
Así, diferentes miembros del Ejecutivo han descartado un eventual rescate de la economía española y han rechazado de plano la posibilidad de que España sufra un 'corralito'.
OTRA EMISIÓN DE MAYO
En cualquier caso, el equipo de Mariano Rajoy confía en enviar esta tarde una señal clara a los mercados del compromiso de todas las administraciones para reducir el déficit tras la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).
A lo largo del mes de mayo, el Tesoro realizará una subasta más de letras a 3 y 6 meses el próximo día 22 y no volverá a emitir hasta el 7 de junio, cuando realizará una subasta de bonos. En junio, celebrará también dos subastas de letras y una de obligaciones.
