viernes. 19.04.2024
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 7.6.2010

En declaraciones a los medios en los pasillos del Senado, Celestino Corbacho ha recordado que se trata de intentar salvar un acuerdo antes el decreto anunciado el próximo 16 de junio, ha reconocido que ésta será la última oportunidad de alcanzar una reforma consensuada y no ha ocultado que "la situación es muy complicada". "La reunión de mañana será la última", ha afirmado antes de señalar que, "efectivamente, el Gobierno tiene previsto presentar mañana concreciones sobre las materias que se han ido hablando", a lo que ha añadido que el Ejecutivo "ha constatado diferencias en algunas de ellas". Su previsión es que "la situación es complicada y puede ser difícil el acuerdo, pero mañana lo sabremos una vez desarrollemos la reunión".

Por otro lado, en respuesta a una pregunta de la senadora del PP Alicia Sánchez-Camacho, Corbacho ha explicado que la decisión del Gobierno de ampliar el marco temporal de las negociaciones de la reforma laboral en varias ocasiones respondió a su "firme voluntad" de lograr un acuerdo. Asimismo, ha asegurado que la ausencia de reforma laboral durante este tiempo no justifica la destrucción de empleo, pero que "otra cosa es que para salir de la crisis se necesite adaptar el mercado laboral para que funcione de forma diferente".

Sánchez-Camacho le ha reprochado que el Gobierno ha perdido dos años y medios en los que podría haber realizado una reforma laboral necesaria para flexibilizar el mercado de trabajo. "No son capaces de llegar a ningún acuerdo con los agentes sociales ni entre ustedes mismos", le ha espetado.

El Gobierno concreta su propuesta