El Banco Sabadell cree que la cartera de créditos con mayor riesgo de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), que asciende a 24.000 millones de euros, generará en los próximos años unas pérdidas de al menos 11.000 millones, más del doble de la cifra que maneja el Banco de España.
El consejero delegado del Banco Sabadell -el nuevo propietario de la CAM-, Jaume Guardiola, indicó que la cifra que maneja el Banco de España, 5.500 millones, es demasiado optimista, aunque está basada en el estudio de una consultora.
Aunque Guardiola no ha querido dar una cifra, sí ha matizado que las perdidas "estarán más cerca de los 17.000 millones (cifra máxima que será cubierta por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), según los acuerdos de la operación) que de los 5.500 millones".
Ello revela que, según los cálculos de la entidad catalana, las perdidas esperadas serán al menos de unos 11.000 millones. El 80 por ciento será cubierto por el FGD, en tanto que el resto lo pagará el Sabadell, según las condiciones del acuerdo.
Los informes que han emitido los analistas, por su parte, hablan de unas perdidas que se situarán entre los 15.000 y los 20.000 millones.
Guardiola fue invitado hoy en Madrid por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) para dar cuenta de los planes del Sabadell tras la adquisición de la caja alicantina, que le fue adjudicada el pasado miércoles.
En su exposición, el consejero delegado mostró una gran confianza en la capacidad del Sabadell para poner de nuevo en funcionamiento la red de oficinas de la CAM que, según dijo, cuenta con un personal "muy profesional".
"Son buenos profesionales. En las reuniones que he mantenido con ellos me han sorprendido gratamente. Incluso contaban la realidad de lo que ha sido la caja un poco avergonzados. La recuperación de la CAM se hará contando con los propios equipos de la CAM", apuntó.
Indicó además que la adquisición de la entidad alicantina obligará a cerrar unas 300 sucursales de alguna de las dos redes, y avanzó que, aunque la sede central se integrará con la del Sabadell, se dejará en Alicante un gran centro regional para gestionar los más de dos millones de clientes que tiene la caja, y que han demostrado una gran fidelidad.
