De Guindos reducirá un 40 por ciento la inversión pública en 2012

De Guindos ha recordado con ironía que del déficit previsto en 2011 -6 % del PIB- "únicamente se han pasado en 25.000 millones", con el "impacto" de tener que reducir ahora el gasto público en consumo un 11,5 % -dato que ya se conocía- y la inversión pública un 40 %.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha adelantado hoy que la inversión pública en 2012 se reducirá un 40 % debido a la necesidad de compensar la "falta de responsabilidad" de sus antecesores socialistas.

El Gobierno ha previsto este año una caída de la economía del 1,7 % del PIB, y una tasa de paro del 24 %

En la sesión de control al Gobierno en el Congreso, De Guindos ha reprochado al PSOE que su "herencia" les obligue al "mayor esfuerzo de reforma y ajuste presupuestario que ha tenido que llevar a cabo un Gobierno desde el inicio de la Transición".

"Pero no tenga la más mínima duda de que volveremos a poner a España en la senda de la prosperidad de la cual nunca debió haber salido como consecuencia de sus políticas", ha dicho a la diputada socialista Inmaculada Rodríguez-Piñero.

También ha recalcado que cuando asumieron el Gobierno lo hicieron con una economía "abocada hacia la recesión", y "con una recuperación que nunca tuvo lugar después de la recaída del año 2008 y 2009", a diferencia del resto de los socios de la Unión Europea.

Ha enumerado asimismo los "problemas enormes de liquidez en comunidades autónomas", los retrasos en los pagos a proveedores "inaceptables desde cualquier punto de vista y sobre todo de la reputación de la economía española", un déficit de provisiones en el sector bancario de más de 52.000 millones de euros y "el mayor deterioro laboral de la OCDE".

Sin embargo, la diputada socialista le ha invitado a "rectificar" sus previsiones de recorte y reforma laboral, tal y como se ha hecho con el déficit -que del 4,4 % previsto pasará al 5,8 % en 2012- para que este año "no sea perdido para el empleo".

También ha pedido que hagan "lo posible" para que sus propias previsiones no se cumplan.