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NUEVATRIBUNA.ES / L.M. - 21.01.2010

El presidente de la patronal, Gerardo Díaz Ferrán, se enfrenta a una investigación por posible fraude que abrió hoy la Fiscalía al apreciar “con meridiana claridad hechos de apariencia delictiva” en el cierre de Air Comet. Por otro lado, Ecuador calificó hoy de “estafa premeditada” la acción de los gestores de la aerolínea propiedad del jefe de la patronal.

Las diligencias abiertas por la Fiscalía contrastan con la negativa del juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, que se ha negado en dos ocasiones a admitir la denuncia presentada por los consumidores. Donde Pedraz apreció falta de concreción, la Fiscalía ve la existencia de hechos que “pueden ser definidos como una conducta defraudatoria que afecta a un importante número de personas”.

Los consumidores sostienen que la compañía propiedad de Díaz Ferrán y su socio Gonzalo Pascual continuó vendiendo billetes tras conocer que estaba abocada al cierre. El pasado 21 de diciembre un juez de Londres precipitó la suspensión de actividad de Air Comet al embargar 13 aviones por el impago de 17,5 millones de euros al banco alemán Nord Bank.

Según los consumidores, al menos 400 pasajeros afectados compraron billetes el 19 de diciembre e incluso los días 20 y 21 del mismo mes. Además, los consumidores ven en las declaraciones de Díaz Ferrán ante la prensa el 23 de diciembre –cuando dijo que “si hubiera visto la situación desde fuera, no habría elegido Air Comet para viajar a ningún sitio”- como una declaración explícita de su culpabilidad.

Ecuador consideró hoy que la quiebra de la compañía constituyó “una estafa premeditada” que afectó a los “derechos económicos” de los migrantes, según declaró la secretaria del Migrante (SENAMI), Lorena Escudero, quien cifra en 2.000 personas el número de ecuatorianos damnificados.

UN APLAUSO NO ‘TAN CERRADO’

El cierre de Air comité ha obligado a Díaz Ferrán a recabar apoyos en el seno de la organización patronal. La última de estas ocasiones se produjo en el transcurso de la última reunión de su junta directiva, celebrada el miércoles pasado. Un portavoz de CEOE relató entonces a la prensa que el jefe de la patronal preguntó en esta junta “si alguien quería pedir su dimisión o tenía algo que decir”. Según este portavoz, la respuesta fue “un aplauso cerrado” de todos los partícipes.

Sin embargo, fuentes consultadas por EFE rebajan la calidad de este aplauso a la categoría de “tibio” respaldo y no “tan caluroso” y relatan que algunos vicepresidentes no aplaudieron y otros lo hicieron por “cortesía”. En estas fuentes añaden que, aunque en la junta no hubo nadie en su contra, “ha habido frialdad” y matizaron que, a pesar de que en la CEOE “domina la burocracia, hay miembros independientes que rechazan la situación”.

Otras voces afirman que Díaz Ferrán se ha salvado de la destitución gracias a la delicada situación económica del país y, en especial, porque la patronal se halla inmersa en una complicada negociación con el Gobierno y lo sindicatos. Nadie quiere en este momento descabezar la patronal, añaden.

Díaz Ferrán se enfrenta a una investigación del fiscal y a las grietas...