nuevatribuna.es
10 de febrero de 2011, 6:34
nuevatribuna.es | 09.02.2011
El vicepresidente de CEOE y presidente de Cepyme, Jesús Terciado, ha admitido que "olvidar" la evolución de la inflación para determinar los salarios va a ser un proceso "muy difícil", al tiempo que ha apostado por combinar la referencia del IPC con la de la productividad.
En pleno periodo de contactos entre los empresarios y sindicatos para reformar la negociación colectiva, Terciado pidió un "esfuerzo" para llegar a un acuerdo para vincular los sueldos a la productividad, pues reconoció que se parte desde posturas distantes.
"No hay que olvidar la referencia del IPC, pero hay que introducir elementos de productividad", señaló el vicepresidente de la patronal en una entrevista a CEOE TV recogida por Europa Press, para después garantizar que esta combinación será la "clave" para que las negociaciones bipartitas fructifiquen.
En este sentido, criticó que la indexación de los salarios al IPC en España no ha sido "pura y dura", por lo que denunció que en "muchos" años el incremento en los sueldos ha superado "notablemente" dicha referencia.
"En años de bonanza ha sido asumible, pero en momentos de dificultad e incluso de no tanta dificultad pone a las empresas en una situación muy complicada", explicó el patrón de pymes.
MÉNDEZ REPLICA AL GOBIERNO
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha replicado al Gobierno que "tiene poco que decir" sobre el debate suscitado a raíz de la propuesta de la canciller alemana, Angela Merkel, de fijar los salarios a la productividad y no a la inflación, al reivindicar la "responsabilidad exclusiva" de sindicatos y empresarios.
El líder sindical respondía de este modo al ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, quien se mostró partidario de que los salarios incorporen "mejor" la productividad y de que se tenga más en cuenta la situación de cada empresa y sus resultados en la política retributiva.
En declaraciones a Antena 3, Méndez aseguró que los sindicatos no tienen "ningún miedo a hablar" de productividad, y aprovechó para recordar que los sueldos se determinan por tres elementos pactados entre las centrales y la patronal: previsiones de IPC, cláusulas de revisión y reparto negociado de la productividad.
"Si lo que se pretende es utilizar como coartada la productividad para reducir salarios, se encontrarán con el rechazo rotundo de los sindicatos", avisó el secretario general de UGT, quien también reprochó el director general del Servicio de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, que considerara un "obstáculo" la indexación de los salarios: "El Banco de España no tiene fuerza moral".
BBVA COINCIDE CON EL BANCO DE ESPAÑA
Por su parte, el Servicio de Estudios del BBVA (BBVA Research) coincide con el Banco de España en que hay que desvincular los salarios de la inflación y ligarlos a las condiciones económicas de la empresas y a factores de productividad para evitar espirales inflacionistas que no garantizan el aumento del poder adquisitivo de los trabajadores.
Así lo ha puesto de manifiesto el economista jefe para España de BBVA Research, Rafael Doménech, en la presentación del documento 'Situación España' correspondiente al primer trimestre, donde ha asegurado que una decisión de este tipo haría frente a "uno de los males" de la economía española: realizar los ajustes vía cantidades y no vía precios y salarios.
Según Doménech, el mecanismo de fijación salarial es "inadecuado" y no es lo suficientemente flexible, por lo que es necesario abordarlo en el marco de la necesaria modernización de la negociación colectiva, que actualmente negocian empresarios y sindicatos.
