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NUEVATRIBUNA.ES - 16.04.2009

La vicepresidenta segunda y ministra de economía, Elena Salgado, completó hoy su ronda de contactos con los principales implicados en la negociación de las reformas que se esperan en el campo laboral al reunirse con los presidentes de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y de Cepyme, Jesús Bárcenas, quienes hicieron llegar sus propuestas a la ministra.

Por su parte, Elena Salgado se comprometió a dar "mayor agilidad" a la infraestructura del ICO para paliar los problemas de financiación que tienen las empresas.

Según Bárcenas, la vicepresidenta económica tiene un "gran conocimiento" de la problemática que tienen las empresas ante la crisis, algo que, reconoció, le "sorprendió".

Gerardo Díaz Ferrán ofreció a Salgado su “total colaboración” al Ejecutivo para “tirar del carro” en la misma dirección a fin de superar la crisis.

Sin embargo, el tema del día giró en torno a la petición del gobiernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, ‘Mafo’, quien solicitó en el Congreso una reforma del sistema de pensiones, en concreto, el aumento del tiempo de cotización tenido en cuenta para calcular la pensión de los jubilados, así como retrasar hasta los 67 años la edad de jubilación.

Jesús Bárcenas, presidente de Cepyme, pidió hoy que se tengan en cuenta las recomendaciones del gobernador del Banco de España. “Si no, mal nos va a ir”, advirtió.

Por otra parte, el presidente de Cepyme aseguró que en España hace falta una reforma laboral "sin lugar a dudas", porque el mercado de trabajo tiene "bastantes estrecheces". Sin embargo, hizo hincapié en que, en el momento actual, hay otras cosas que "apremian mucho más", como el acceso a la financiación y frenar la morosidad.

"No nos podemos parar en la reforma laboral y cebarnos en esta historia, que puede complicarnos el diálogo social. Hay que entenderla como un área más, importante, pero sin darle el protagonismo que le hemos dato en los últimos tiempos", concluyó.

Por su parte, Gerardo Díaz Ferrán, presidente de CEOE, se mostró también partidario de retrasar la edad de jubilación, en contra de lo expresado hoy por el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, y los sindicatos, que arremetieron contra las propuestas del gobernador del Banco de España. “Yo tengo 66 años, voy a cumplir los 67 en diciembre, y sigo trabajando”, indicó.

Respecto a la advertencia lanzada ayer por el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, de que la Seguridad Social podría perder su superávit este año, Díaz Ferrán señaló que el Gobierno ha elaborado unos Presupuestos Generales del Estado que hablan de un saldo positivo de las cuentas de 10.000 millones de euros. "Yo conozco eso", señaló.

En cuanto a sus propuestas en materia laboral, Díaz Ferrán incidió en la necesidad de "flexibilizar" el mercado de trabajo a través de la modificación del contrato a tiempo parcial, la lucha contra el "preocupante absentismo laboral", el impulso a las empresas de trabajo temporal (ETT) y la reducción del "elevado" y "penalizador" coste de la Seguridad Social para las empresas españolas. "Se trata de hacer el mercado laboral más seguro y más flexible", incidió.

Asimismo, insistió en la reforma de la fiscalidad de las empresas, empezando por reducir el Impuesto de Sociedades, modificar el "obsoleto" Impuesto de Actividades Económicas o suprimir el de Sucesiones y Donaciones. Asimismo, plantea otro tipo de reformas en materia energética, de política del agua o incluso de la Justicia en lo referente al alquiler de viviendas.

Además, reiteró el compromiso de la patronal con el diálogo social, tanto a nivel bipartito (sindicatos y empresarios) como tripartito (agentes sociales y Gobierno), para luchar "todos juntos" contra la "continua" destrucción de empleo.

Díaz Ferrán mostró su confianza en la nueva titular del Ministerio de Economía y Hacienda, con la que ha colaborado cuando estaba al frente de la cartera de Administraciones Públicas. "Estoy convencido de que el Ministerio va a funcionar muy bien con la nueva vicepresidenta", aseguró, si bien explicó que la de hoy sólo fue una primera toma de contacto.

Cepyme considera que hay asuntos más urgentes que una reforma laboral