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29 de junio de 2010, 10:24
NUEVATRIBUNA.ES- 28.06.2010
Comisiones Obreras (CCOO) criticó hoy con dureza al Grupo de los 20 países más desarrollados del mundo y los emergentes (G20), a los que el sindicato acusa de incumplir “flagrantemente” sus compromisos, tras lo que califica como un “fracaso” de la última cumbre de Toronto (Canadá). A su juicio, las conclusiones son “decepcionantes” y demuestran la “incapacidad” de este organismo par coordinar las políticas económicas de estos países.
CCOO acusa a los líderes mundiales de incumplir “flagrantemente” compromisos adquiridos en anteriores cumbres. Respecto a las conclusiones, afirma que son “vagas, imprecisas y contradictorias”. “Los líderes mundiales han dejado al mundo sin una política coherente y global frente a la crisis”, afirma.
Para el sindicato, la Unión Europea (UE), Japón y Canadá han logrado imponer sus criterios a Estados Unidos y los países emergentes en lo relativo a políticas macroeconómicas. En particular, critica que haya sido “abandonado” el compromiso de mantener las políticas de estímulo a la demanda. Por el contrario, se ha impuesto la necesidad de reducir los déficit públicos a la mitad en 2013, aunque esta orientación pemite que cada país haga lo que estime conveniente.
El sindicato tacha incluso de “palabrería hueca e hipócrita” algunas afirmaciones del documento aprobado en Toronto. En particular, critica que se defiendan incrementos del gasto en infraestruturas, el empleo y la protección social, mientras que “las naciones europeas están haciendo justo lo contrario, y de manera radical”, señala.
El segundo gran fracaso de la Cumbre de Toronto se refiere a la regulación financiera, defiende CCOO, que critica la falta de acuerdos en este sentido, que se postergan hasta la reunión en Corea del próximo mes de noviembre. “En este campo las propuestas de EE UU y la UE se han encontrado con la oposición de los países emergentes”, critica. “De la tasa a las transacciones financieras, ni palabra”, añade. Y, culmina, sobre los “especuladores”, “¡ni se menciona el problema!”
FALTA DE ATENCIÓN AL EMPLEO
“Tal vez”, concluye CCOO, “lo más grave” para el sindicato sea la escasa atención prestada a las conclusiones de la conferencia de ministros de Trabajo que se celebró en abril en Washington. Estas políticas incluían la recomendación de mantener las políticas de estímulo, así como otras de apoyo al llamado ‘trabajo decente’ –con derechos-. Sin embargo, continúa, “el primer ministro de Canadá, anfitrión de la Cumbre, ni siquiera las incluyó en el orden del día”, se lamenta el sindicato español.
Para el sindicato, las conclusiones de la Cumbre de Toronto suponen un “serio retroceso” y muestran la “carencia de liderazgo político en la economía globalizada”. Además, suponen una “pérdida de credibilidad de los principales políticos mundiales” que ponen en “serio riesgo la democracia” en un mundo “otra vez dominado por los mercados”, asegura.
Por todo ello, CCOO y la Confederación Sindical Internacional (CSI) consideran “imprescindible la movilización nacional y transnacional de los trabajadores” en demanda de un cambio en las políticas sobre empleo y contra los planes de ajuste y los recortes en los sistemas de protección social.
Comisiones Obreras (CCOO) criticó hoy con dureza al Grupo de los 20 países más desarrollados del mundo y los emergentes (G20), a los que el sindicato acusa de incumplir “flagrantemente” sus compromisos, tras lo que califica como un “fracaso” de la última cumbre de Toronto (Canadá). A su juicio, las conclusiones son “decepcionantes” y demuestran la “incapacidad” de este organismo par coordinar las políticas económicas de estos países.
CCOO acusa a los líderes mundiales de incumplir “flagrantemente” compromisos adquiridos en anteriores cumbres. Respecto a las conclusiones, afirma que son “vagas, imprecisas y contradictorias”. “Los líderes mundiales han dejado al mundo sin una política coherente y global frente a la crisis”, afirma.
Para el sindicato, la Unión Europea (UE), Japón y Canadá han logrado imponer sus criterios a Estados Unidos y los países emergentes en lo relativo a políticas macroeconómicas. En particular, critica que haya sido “abandonado” el compromiso de mantener las políticas de estímulo a la demanda. Por el contrario, se ha impuesto la necesidad de reducir los déficit públicos a la mitad en 2013, aunque esta orientación pemite que cada país haga lo que estime conveniente.
El sindicato tacha incluso de “palabrería hueca e hipócrita” algunas afirmaciones del documento aprobado en Toronto. En particular, critica que se defiendan incrementos del gasto en infraestruturas, el empleo y la protección social, mientras que “las naciones europeas están haciendo justo lo contrario, y de manera radical”, señala.
El segundo gran fracaso de la Cumbre de Toronto se refiere a la regulación financiera, defiende CCOO, que critica la falta de acuerdos en este sentido, que se postergan hasta la reunión en Corea del próximo mes de noviembre. “En este campo las propuestas de EE UU y la UE se han encontrado con la oposición de los países emergentes”, critica. “De la tasa a las transacciones financieras, ni palabra”, añade. Y, culmina, sobre los “especuladores”, “¡ni se menciona el problema!”
FALTA DE ATENCIÓN AL EMPLEO
“Tal vez”, concluye CCOO, “lo más grave” para el sindicato sea la escasa atención prestada a las conclusiones de la conferencia de ministros de Trabajo que se celebró en abril en Washington. Estas políticas incluían la recomendación de mantener las políticas de estímulo, así como otras de apoyo al llamado ‘trabajo decente’ –con derechos-. Sin embargo, continúa, “el primer ministro de Canadá, anfitrión de la Cumbre, ni siquiera las incluyó en el orden del día”, se lamenta el sindicato español.
Para el sindicato, las conclusiones de la Cumbre de Toronto suponen un “serio retroceso” y muestran la “carencia de liderazgo político en la economía globalizada”. Además, suponen una “pérdida de credibilidad de los principales políticos mundiales” que ponen en “serio riesgo la democracia” en un mundo “otra vez dominado por los mercados”, asegura.
Por todo ello, CCOO y la Confederación Sindical Internacional (CSI) consideran “imprescindible la movilización nacional y transnacional de los trabajadores” en demanda de un cambio en las políticas sobre empleo y contra los planes de ajuste y los recortes en los sistemas de protección social.
