El recorte supondrá un ahorro de 115 millones de euros cada año y el posible despido de 800 personas, si bien el Ejecutivo abrirá un proceso de negociación para "mitigar el número" de afectados.
En rueda de prensa, el presidente balear José Ramón Bauzá ha admitido que "no es fácil" adoptar decisiones de estas características y ha remarcado la necesidad de no pensar en que, con la actual situación económica, "podemos seguir viviendo en las mismas condiciones". Asimismo, ha detallado que esta reducción del sector público genera un ahorro de 115 millones cada año, de manera que, durante los próximos dos años, quedará saldada la deuda con los proveedores "y dejaremos de generar deuda".
En cuanto a los posibles despidos, el director de la Oficina de Control Presupuestario, Joaquín García, entidad que se ha encargado de realizar el estudio, ha indicado que se tendrá que analizar "persona a persona" y, "a partir de ahí", se adoptará una determinación.
