nuevatribuna.es
30 de septiembre de 2010, 4:11
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 29.9.2010
Decenas de miles de personas se han congregado este miércoles en Bruselas para protestar contra los planes de austeridad de los Gobiernos europeos, en una manifestación que a media jornada se había saldado con más de un centenar de detenciones de carácter preventivo. El mensaje que han pretendido lanzar a los gobiernos europeos es "no a la austeridad" y que pongan freno a los recortes con los que quieren hacer frente a la crisis y que temen que "deteriorarán" la situación económica y social.
Se esperaba que entre 80.000 y 100.000 personas acudieran a la capital belga y sede de las instituciones europeas para esta marcha, convocada por la Confederación Europea de Sindicatos (CES) en el marco de una jornada de acción en varios países. Sobre el balance definitivo, la Policía ha avisado de que sólo al final de la jornada facilitará cifras sobre la movilización mientras que los representantes sindicales avanzan el número de varias decenas de miles de participantes. Un total de 148 personas han sido detenidas al margen de la euromanifestación, según un portavoz policial, que ha explicado que se trata de arrestos preventivos.
"Los trabajadores están hoy en las calles con un mensaje claro para los dirigentes de Europa: todavía estamos a tiempo de no escoger la austeridad, todavía podemos cambiar de rumbo", ha comentado antes de la partida de la marcha John Monks, secretario general de la CES. Para el líder sindical, las medidas tomadas por los Gobiernos para hacer frente a sus déficits públicos, ampliados por la crisis económica, "tendrán un efecto desastroso para los individuos y para la economía".
En opinión de Monks, el hecho de que los líderes europeos se hayan marcado como prioridad "pagar la deuda" va a "empujar la economía a una gran recesión" y ha calificado de "locura" la idea imponer sanciones a los países con déficit excesivo. Los sindicatos europeos son conscientes de que los 27 tienen "desafíos que superar", pero Monks les ha pedido que "se tomen su tiempo" para reducir el déficit. "No hay urgencia, que no cunda el pánico", ha dicho. A su juicio, los recortes en Grecia e Irlanda no han supuesto para estos países ningún beneficio para el crecimiento y el empleo, por lo que los 27 deberían "no precipitarse con medidas de austeridad drásticas, y orientar el gasto público hacia la inversión".
Precisamente este miércoles, la Comisión Europea ha propuesto sanciones de hasta el 0,2% del producto interior bruto para los países de la eurozona con déficit o desequilibrios excesivos, como burbujas inmobiliarias.
Decenas de miles de personas se han congregado este miércoles en Bruselas para protestar contra los planes de austeridad de los Gobiernos europeos, en una manifestación que a media jornada se había saldado con más de un centenar de detenciones de carácter preventivo. El mensaje que han pretendido lanzar a los gobiernos europeos es "no a la austeridad" y que pongan freno a los recortes con los que quieren hacer frente a la crisis y que temen que "deteriorarán" la situación económica y social.
Se esperaba que entre 80.000 y 100.000 personas acudieran a la capital belga y sede de las instituciones europeas para esta marcha, convocada por la Confederación Europea de Sindicatos (CES) en el marco de una jornada de acción en varios países. Sobre el balance definitivo, la Policía ha avisado de que sólo al final de la jornada facilitará cifras sobre la movilización mientras que los representantes sindicales avanzan el número de varias decenas de miles de participantes. Un total de 148 personas han sido detenidas al margen de la euromanifestación, según un portavoz policial, que ha explicado que se trata de arrestos preventivos.
"Los trabajadores están hoy en las calles con un mensaje claro para los dirigentes de Europa: todavía estamos a tiempo de no escoger la austeridad, todavía podemos cambiar de rumbo", ha comentado antes de la partida de la marcha John Monks, secretario general de la CES. Para el líder sindical, las medidas tomadas por los Gobiernos para hacer frente a sus déficits públicos, ampliados por la crisis económica, "tendrán un efecto desastroso para los individuos y para la economía".
En opinión de Monks, el hecho de que los líderes europeos se hayan marcado como prioridad "pagar la deuda" va a "empujar la economía a una gran recesión" y ha calificado de "locura" la idea imponer sanciones a los países con déficit excesivo. Los sindicatos europeos son conscientes de que los 27 tienen "desafíos que superar", pero Monks les ha pedido que "se tomen su tiempo" para reducir el déficit. "No hay urgencia, que no cunda el pánico", ha dicho. A su juicio, los recortes en Grecia e Irlanda no han supuesto para estos países ningún beneficio para el crecimiento y el empleo, por lo que los 27 deberían "no precipitarse con medidas de austeridad drásticas, y orientar el gasto público hacia la inversión".
Precisamente este miércoles, la Comisión Europea ha propuesto sanciones de hasta el 0,2% del producto interior bruto para los países de la eurozona con déficit o desequilibrios excesivos, como burbujas inmobiliarias.
