sábado. 20.04.2024
rosell

De nuevo, el Presidente de la CEOE, Juan Rosell, con sus declaraciones sobre el desempleo, nos demuestra que lo suyo es una mezcla terrorífica entre frivolidad, elitismo, ignorancia y profunda insensibilidad social.

Es legítimo que el Sr. Rosell reflexione sobre la utilidad de nuestro sistema de medición del desempleo y las diferencias entre los datos de la EPA y los de paro registrado del Servicio Estatal Público de Empleo (SEPE). Pero es insultante que lo haga con tanta frivolidad.

Se puede dudar sobre si los datos de la EPA, con 5,9 millones de desempleados reflejan correctamente la realidad o ignoran a personas que desarrollan algún trabajo retribuido de manera informal y sumergida. De la misma manera que se puede afirmar que muchas personas sin empleo, ni expectativas de tenerlo, dejan de estar inscritos en el SEPE y no por ello dejan de estar desempleadas.

Pero lo que no se puede hacer y menos desde la Presidencia de la CEOE es analizarlo con la frivolidad a la que nos tiene acostumbrados el Sr. Rosell. Y que nadie piense que fue un descuido. Sus declaraciones están pensadas, las viene reiterando durante los años de la crisis, y pretenden minimizar el nivel de desempleo en España, al tiempo que culpabilizar a las víctimas que es un buen camino para sumirlas en la resignación.

Que no improvisó lo confirma que en sus declaraciones intentó ser políticamente correcto. Habló de amas y de “amos” de casa y seguro que se quedó tan contento con la sensibilidad “feminista” que estaba demostrando. Para Rosell no hay personas, con o sin empleo, que se ocupan de las tareas domésticas. Para Rosell lo que hay son personas que tienen la función de amas de casa y ahora con la crisis, también amos de casa, que van a ver que pillan del subsidio de desempleo. No lo pueden evitar, sudan elitismo.

Además, las declaraciones traslucen una gran ignorancia, mezclada de mala fe. Rosell parece desconocer los duros requisitos de acceso a las prestaciones y subsidios de desempleo y la escasa cobertura que tienen hoy las personas desempleadas. Con datos de Junio 2014 solo el 57,71% de personas desempleadas e inscritas en SEPE cobran alguna prestación, cuando hace un año eran el 61,5%. Y lo que es peor, de los que cobran más del 50%  percibe solo el subsidio asistencial, o sea 426 euros.

¿Sabe, el Sr Rosell que el subsidio asistencial solo alcanza el 80% del IPREM, o sea 426 euros al mes? ¿Sabe que este subsidio, como el IPREM y el Salario Mínimo han sido congelados durante el 2014 para contribuir a la “recuperación”? ¿Sabe que los requisitos de acceso se han endurecido desde Julio del 2012 y que muchas personas que lo cobraban ahora no tienen acceso a él? ¿Sabe el Sr Rosell que las amas/os de casa que se inscriben como desempleados -o sea que no provienen de la prestación contributiva por haber cotizado antes- solo perciben el subsidio asistencial de 426 euros si reúnen de manera simultánea los requisitos de ser mayor de 55 años, haber cotizado al menos 6  años al largo de su vida laboral , no tener ingresos familiares que superen el 75 del SMI en función de los miembros de la unidad familiar? ¿Sabe el Sr Rosell que solo que exista en la familia un trabajador mileurista, la ama/o de casa ya no tiene derecho al subsidio asistencial? ¿Sabe lo que es que tus ingresos diarios sean de 14,2 euros?

Posiblemente ni lo sabe, ni le interesa. Este no es su mundo. El suyo es el mundo de los triunfadores, convertidos en triunfocratas, que han perdido, si alguna vez lo tuvieron, cualquier vínculo emocional con la gente que sufre las consecuencias de la crisis que otros han provocado.

Afortunadamente hay otra manera de ser empresario y de concebir la función social de la empresa. Y ejemplos los hay en España. Pero parece que la CEOE tiene una especial capacidad para atraer a su Presidencia a lo más glorioso del empresariado de este país. Esta si es la verdadera y más urgente reforma que se necesita, la de las Organizaciones empresariales .

Juan Rosell y los amos de casa