viernes. 29.03.2024

La Confederación Estatal de Prejubilados y Pensionistas (CEYP) ha criticado la reforma de las pensiones y el nuevo sistema de revalorización de las mismas al considerar que se trata de una "tomadura de pelo", y ha mostrado su "total rechazo" a desligar la subida anual de estas prestaciones del IPC.

En un comunicado, la confederación considera que garantizar únicamente un incremento mínimo de las pensiones del 0,25% anual, como hace el nuevo sistema de revalorización, condena a todos los pensionistas, actuales y futuros, a una pérdida de poder adquisitivo "permanente".

Para CEYP, el Estado debe ser el responsable de dotar al sistema público de pensiones de los medios económicos suficientes para responder a sus compromisos, con cargo a los Presupuestos Generales del Estado si es preciso, y rechaza totalmente cualquier rebaja de las cotizaciones sociales, tanto en momentos de crisis como de bonanza económica.

"La intención de establecer una relación directa cotizaciones-pensiones, olvidando que las pensiones son un derecho de los trabajadores, supone un ataque frontal al sistema social que viene funcionando en nuestro país desde antes de la última transición política", subraya.

Prejubilados y pensionistas consideran que los más de 59.000 millones de euros del Fondo de Reserva de la Seguridad Social debería permitir una discusión tranquila del futuro de las pensiones y "no lo que se propone por la vía de urgencia y hechos consumados".

Según CEYP, no se puede permitir que un Estado que rescata al sistema financiero "sin límite de gastos", trate de "abandonar" a más de 8 millones de pensionistas, que en la actual situación, con más de 6 millones de trabajadores en el paro y los salarios en "claro declive", solo puede dar unos resultados negativos.

Por último, la confederación afirma que el futuro del sistema público de pensiones es, en esencia, un problema político. "Es la voluntad política de atender los derechos de los pensionistas, con la garantía del Estado, lo que asegura su viabilidad a corto, medio y largo plazo", concluyen.

Prejubilados y pensionistas califican la reforma de pensiones de "tomadura de pelo"