jueves. 25.04.2024

Del total de contratos suscritos a lo largo de 2014, sólo el 8% fueron indefinidos

La reducción del paro en diciembre en 64.405 personas (-1,43%), 5.404 en términos desestacionalizados, se debe en parte a la mejora del empleo, pero también a la retirada de la actividad laboral de personas desanimadas, por la falta de oportunidades decentes, y por la emigración fuera del país en busca de mejores alternativas.

El paro registrado en diciembre descendió en 64.405 personas con respecto al mes anterior (-1,43%). La rebaja es, sin embargo, muy ligera si se analiza en términos desestacionalizados, 5.404 parados menos. Con ello la cifra total de paro se sigue situando en un nivel muy elevado, 4.447.711 desempleados. La rebaja fue de 253.627 parados en los últimos doce meses (-5,4%).

La reducción del desempleo se debe sólo en parte a la mejora del empleo, otra parte –como viene indicando la EPA- se explica por la retirada de la actividad laboral de personas desanimadas, por la falta de oportunidades decentes, y por la emigración fuera del país en busca de mejores alternativas.

La rebaja intermensual del paro se concentra en las mujeres (-56.703), mientras que en los hombres desciende en mucha menor medida,-7.702. Esta distribución se explica porque el desempleo cae en las actividades de servicios feminizadas mientras que aumenta en la industria y la construcción. Asimismo, esto no sucede en términos anuales, donde son los hombres (-183.204) quienes registran un descenso superior al de las mujeres (-71.423). El volumen de paro femenino (2.335.203) continúa situándose por encima del masculino (2.112.508) en diciembre.

En 2014 se registraron 16.727.089 contratos, lo que da una idea de la elevada rotación laboral que sufre los trabajadores temporales y ahora también –tras la reforma laboral- los indefinidos. Del total de contratos suscritos a lo largo de 2014, sólo el 8% fueron indefinidos.

Algunas conclusiones

• El crecimiento del empleo y la reducción del paro han continuado en diciembre, siendo débiles y escasos para atender al elevado número de personas que no encuentran empleo, 5.428.000 parados. Además, una parte de la rebaja del paro se explica –como viene indicando la EPA- no por la mejora de la ocupación, sino por el desánimo y la emigración ante la falta de ofertas de trabajo decentes.

• El aumento de la afiliación se localiza, básicamente, en el sector público y en sectores de bajo valor añadido (comercio y hostelería), que generan empleos inestables y donde se pagan salarios bajos. En consecuencia, no se observa un cambio en el modelo productivo liderado por la industria y lo sectores de alto contenido tecnológico, lo que pone en duda la solidez a medio plazo de los incrementos de la afiliación a la Seguridad Social y la rebaja del paro.

El empleo que se crea es precario: temporal y a tiempo parcial. Esto, sumado a la devaluación salarial fomentada por la reforma laboral, hace que encontrar un trabajo sea cada vez menos una garantía para poder llevar una vida independiente o salir de la pobreza, y está también detrás del importante aumento de los índices de exclusión social.

• Ante este mal panorama es necesaria una política presupuestaria que fomente el cambio estructural del aparato productivo, que promueva el uso eficiente de los recursos públicos en todos los niveles de la Administración y que ayude a recuperar la demanda interna. El objetivo debe ser sacar a la  economía española de su patrón tradicional de crecimiento de bajo valor añadido, sin industria, empleo inestable y salarios bajos. Para ello hace falta aumentar suficientemente la inversión pública y reorientarla hacia la mejora de la calidad y el contenido tecnológico de las empresas. La injusta rebaja de impuestos promovida por el Gobierno no persigue este fin, sino el rédito político a corto plazo.

• Asimismo, es necesario mejorar el poder de compra de los salarios, para impulsar la demanda interna y provocar un aumento vigoroso del empleo y una rebaja rápida del paro.

El empleo que se crea sigue siendo temporal, parcial y con salarios bajos