Los sindicatos denuncian que el Gobierno pretender dejar Correos en manos de los lobbies privados
“Pánico”. Esta es la palabra que describe, según el sindicato CSIF, el clima que se vive entre la plantilla de Correos tras conocer la partida presupuestaria aprobada por el Gobierno para este año. Según figura en los Presupuestos Generales del Estado para 2018, aún por aprobar, la empresa pública recibirá 120 millones de euros, 60 menos de los que recibió para los ejercicios de 2015 y 2016.
Los recortes comenzaron en 2017 cuando también se consignaron 120 millones. Los sindicatos alcanzaron un acuerdo con el Ministerio de Fomento por el que el Gobierno se comprometía a reintegrar los 60 millones restantes. Sin embargo, el ministro, Íñigo de la Serna, no solo no cumplió este compromiso, sino que recortó aún más, hasta el punto de conceder al final del ejercicio solo 57 millones, es decir 123 millones menos de lo pactado, según datos aportados por la Federación de Servicios Públicos de UGT Madrid.
RECORTES PRESUPUESTARIOS Y DE PLANTILLA
Los continuos recortes presupuestarios han ido parejos a recortes en la plantilla. En los últimos 10 años se han perdido 15.000 empleos estructurales y cada vez son más los contratos a tiempo parcial. La empresa sigue bloqueando el Convenio Colectivo y el Acuerdo Funcionarial y “está imponiendo un modelo de empleo basado en la eventualidad (35% de la plantilla), los tiempos parciales (22% de la plantilla), llegando a implantar contratos de días y horas… Un empleo low cost y unas condiciones laborales cada vez más precarias reguladas en un Convenio y Acuerdo congelados desde hace cuatro años”, denuncia CCOO de Madrid.
En casi una década, la mayor empresa pública del país, con 300 años de historia, sigue acumulando pérdidas principalmente por la dificultad que tiene para expandirse ante la brutal competencia de otras empresas privadas de paquetería (nacionales y extranjeras) para comercio electrónico que están copando el nicho de mercado. Las cuentas de la compañía pública han alcanzado un déficit histórico de 225 millones de euros, según la previsión de los PGE-2018, 103 en 2017 y previsión de 122 para 2018. Según señala CSIF, “las cuentas de Correos correspondientes a 2017 aún no han sido fiscalizadas, sin embargo, el Gobierno tiene en previsión unas pérdidas de 166 millones de euros”.
UNIDAD DE ACCIÓN SINDICAL
La grave situación por la que pasa la empresa postal ha hecho saltar todas las alarmas. Por ello, los sindicatos (CCOO, UGT, CSIF y Sindicato Libre que representan al 85% de la plantilla) han anunciado un calendario de movilizaciones que arrancará el próximo 7 de junio con paros de dos horas en todas las provincias de España (el paro será de tres horas por turno en la Comunidad de Madrid), y que culminará en una manifestación en la capital.
“Este es el inicio de un proceso de movilización ascendente, sostenida y sostenible que se va a prolongar en los próximos meses con la convocatoria de tres huelgas generales a finales de año, paros y concentraciones”, ha anunciado CCOO de Madrid.
Ante el “desmantelamiento” por parte del Gobierno de Correos, los sindicatos reclaman “respuestas y actuaciones inmediatas en defensa de un Correos público y de calidad, y la reconquista de salario, empleo y derechos”.
