jueves. 25.04.2024
por
 

Kuwait está situado al sureste de Asia, bordeando el golfo Pérsico y hace frontera con Iraq y Arabia Saudita. Es un pequeño país de 17.818 kilómetros cuadrados. Sus puntos más distantes son de 200 kilómetros, de norte a sur, y de este a oeste son 170 kilómetros.

Geomorfológicamente el territorio es parte integrante de la meseta Arábiga. Está constituido por las últimas estribaciones del desierto de As-Summan, cuyo relieve tabular desprovisto de relieves significativos está recubierto por sedimentos arenosos.

El territorio de Kuwait es en gran parte desierto, a excepción del oasis de Al - Jahrā, en el extremo occidental de la Bahía de Kuwait, y tiene pocas zonas fértiles en la parte sureste del país y en las zonas costeras.

El territorio de Kuwait también incluye nueve islas, las más grandes de las cuales son las deshabitadas Būbiyān y Al - Warbah. La isla de Faylakah, ubicada cerca de la entrada a la Bahía de Kuwait, está poblada desde tiempos prehistóricos.

El relieve de Kuwait es generalmente plano o ligeramente ondulado, interrumpido sólo por colinas ocasionales y depresiones poco profundas. El rango de altitudes varía desde el nivel del mar en el este hasta los 290 m del monte Al-Shiqāyā, en el lado occidental del país.

La escarpa de al - Zawr, una de las principales estructuras topográficas, se extiende a lo largo de la costa noroeste de la bahía de Kuwait y alcanza una altitud máxima de 145 m. en otras zonas costeras, se han desarrollado grandes zonas de marismas salobres.

En las regiones septentrional, occidental y central de Kuwait, hay cuencas desérticas, que se llenan de agua después de las lluvias de invierno. En la antigüedad estas cuencas eran importantes lugares de riego, refugio para los rebaños de camellos beduinos.

Kuwait no tiene superficies de agua permanentes, ni en forma de masas de agua como lagos, ni de arroyos como ríos perennes. Las corrientes intermitentes llamadas wadi, están localizadas y generalmente se pierden en las cuencas desérticas interiores. La pequeña precipitación se absorbe más allá del nivel de la superficie, y la mayor parte se pierde por evaporación.

Las costas, bajas y arenosas, frente a las cuales se disponen abundantes islas e islotes, son predominantemente irregulares y en ellas destaca la gran bahía de Kuwait, situada en la parte central.

Kuwait tiene un clima desértico, cálido y seco. Las precipitaciones varían desde 75 hasta 150 mm por año en todo el país. Las temperaturas en verano varían entre 42º a 47°, la temperatura más alta registrada en Kuwait ha sido de 54° en mes de julio del año 2016.

La temperatura más baja jamás registrada fue de -4 ° en enero del año 1964, incluso se registraron copos de nieve, y eso es muy peculiar, porque el clima de Kuwait es muy seco. Los veranos son muy extensos, marcados principalmente por fuertes tormentas de polvo, principalmente en el mes de junio y julio. 

A finales de verano, el clima es más húmedo, ocasionalmente hay fuertes tormentas eléctricas. En noviembre el clima es de muy baja temperatura, llega a descender a los 0 ° durante la noche, y en el día la temperatura varía entre 15º a 20°.

Kuwait tiene una población de 4.271.000 habitantes. Más de la mitad de la población está constituida principalmente por inmigrantes de los países árabes vecinos, seguidos de aquellos procedentes de Asia, África oriental y Europa, atraídos por las ofertas de trabajo de la industria petrolífera y sus industrias derivadas, y por el sector de servicios.

Si bien la densidad media de población no es muy elevada, una tercera parte de ésta se concentra en la gran área metropolitana surgida alrededor de la capital, y otro tercio habita en las ciudades petrolíferas del litoral; el resto de la población reside en los pequeños centros urbanos de las regiones centro-oriental y sudoriental.

Etnológicamente la población autóctona está compuesta por árabes del tipo meridional. Kuwait posee una de las rentas per cápita más altas de mundo, mientras la población activa constituye sólo el 10 % de la población total.

Alrededor del 80% de la población kuwaití es árabe. Los kuwaitíes árabes incluyen un gran número de egipcios y también a árabes sin Estado llamados Bidón que es una palabra árabe que significa distinto de beduino.

Muchos árabes de los estados contiguos tomaron residencia en Kuwait a partir de la prosperidad que el petróleo trajo al país en la década de 1940. Sin embargo, tras la ocupación iraquí el gobierno tuvo que hacer grandes esfuerzos para reducir el número de población expatriada.

Otros grandes grupos de inmigrantes incluyen a indios, bengalíes, pakistaníes y filipinos. Kuwait tuvo anteriormente una gran población palestina. La mayor parte de los mismos fueron forzados a salir del país tras el respaldo del líder de la OLP, Yasser Arafat, a Iraq durante la ocupación de Kuwait por parte del régimen de Hussein.

La lengua oficial es el árabe aunque el inglés es generalmente entendido. Algunos inmigrantes también hablan sus propias lenguas locales. Cerca del 85% de la población de Kuwait es musulmana.

De entre los musulmanes kuwaitíes se estima que entre el 70% y el 75% de los mismos pertenecen a la corriente suni y que alrededor del 25% a 30% es de la corriente chií. Una gran parte del chiismo kuwaití se debe a la proximidad de Kuwait con Irán e Iraq.

Hay una importante minoría que practica el hinduismo, y muy pocos kuwaitíes son cristianos. La convivencia de la mayoría musulmana con el resto de religiones es bastante cordial.

Hubo algunos judíos kuwaitíes antes de la década de 1950, sin embargo, todas las familias judías abandonaron Kuwait en la década de 1980.

El grado de alfabetización de Kuwait es el más elevado de entre los países árabes. Esto se debe al amplísimo apoyo gubernamental al sistema educativo. La escuela pública, incluyendo a la universidad de Kuwait, es gratuita pero los estudiantes extranjeros tienen restringido su acceso a las mismas.

SU ECONOMÍA

La economía tradicional del país, basada en la pesca y en el comercio de perlas, fue radicalmente modificada tras la II Guerra Mundial al descubrirse el enorme yacimiento petrolífero de Burgan. Actualmente Kuwait es uno de los primeros productores mundiales de petróleo.

Son de gran importancia los yacimientos de gas natural con más de 700 pozos, que aprovechan la impresionante red de oleoductos conectados a los puertos y a la red nororiental de Arabia Saudí.

Sobre el territorio kuwaití están en activo cinco refinerías, aunque la mayor parte del crudo se exporta. El sector industrial comprende además de las importantes plantas petroquímicas y de fertilizantes, fábricas de cemento y de materiales para la construcción, y gigantescos complejos de desalinización de las aguas del golfo Pérsico, de las que se nutre el consumo interior.

La agricultura y la ganadería son prácticamente inexistentes, únicamente practicadas en los oasis, si bien el Gobierno está invirtiendo todos los medios técnicos y financieros para su desarrollo.

La pesca, bastante desarrollada, aporta el 0,3 % del PIB. La energía eléctrica producida por centrales alimentadas con gas natural, permiten una autonomía completa del sector. Las exportaciones se basan en el crudo y en los productos de las industrias químicas, mientras las importaciones comprenden productos alimenticios, bienes de consumo, equipos de transportes, y materias primas no petrolíferas y semielaboradas.

f6 copia

Los principales socios comerciales son Japón, Alemania y los E.U.A. La red de carreteras se extiende por el litoral y conecta con aquellas de Iraq y Arabia Saudí. Los puertos de Ash Shuwaykh y Mina al-Ahmadi y el aeropuerto de la capital son los puntos principales de las comunicaciones internacionales.

La ciudad de Kuwait es uno de los centros financieros y de negocio más activos del Oriente Próximo. La Kuwait Petroleum Corporation (KPC) es la compañía nacional encargada de todo lo concerniente con la producción de crudo, gas y productos refinados.

SU HISTORIA

La historia del territorio de Kuwait está íntimamente ligada a las civilizaciones mesopotámicas hasta el siglo XIII de nuestra era, cuando la invasión de los mongoles provocó el colapso del califato de Bagdad.

Varios clanes de la tribu Al Aniza, en el siglo XVI, emigraron hacia la orilla norte del golfo Pérsico desde Najd, su tierra natal en Arabia central, zona que estaba muy afectada por las hambrunas.

Los clanes se asentaron en la región que hoy ocupa la actual Qatar, durante más de sesenta años y, más tarde se reasentaron en distintas zonas de la región, incluyendo el actual territorio de Kuwait.

En el siglo XVIII, aunque nominalmente sometidos al imperio Otomano, las etnias árabes instaladas allí gozaban de virtual independencia y decidieron elegir un Jeque que las representase en las negociaciones que esporádicamente se entablaban con los turcos.

Fue designado para es función en el año 1756, el jefe de la familia anaiza, Abdul Rahim al-Sabah, fundador de la dinastía que aún gobierna el país.

En esa época el lugar conocido como Qurain, que significa cuerno, comenzó a ser denominado Kuwait, diminutivo de al-Kout, que en el árabe local designaba a las viviendas fortificadas de la costa.

Hasta el final del siglo XIX, el imperio Otomano estuvo aliado con la familia Sabah para gobernar el país, pero. Cuando en el año 1899 los otomanos amenazaron con anexionarse Kuwait, Los Sabah pidieron a Gran Bretaña el Estatuto de Protectorado.

Gran Bretaña garantizó la integridad territorial del país. Este Tratado y la consiguiente presencia militar inglesa impidieron a los turcos extender la línea férrea Berlín-Bagdad hasta el golfo Pérsico.

Al terminar la I Guerra Mundial, Francia y Gran Bretaña se repartieron los despojos del imperio Otomano. Kuwait pasó a ser un protectorado británico separado del recién creado reino de Iraq, que lo reclamaba como provincia alegando el sometimiento histórico de esa zona al gobierno de Bagdad.

Se descubrió petróleo en Kuwait en el año 1938. Después de la II Guerra Mundial, el emir Ahmad Jabi al-Sabah otorgó la concesión de la Kuwait Oil Co que estaba integrada por la Británica BP y la norteamericana Gulf y en el año 1946 empezó la exportación de petróleo.

Se negoció la independencia de Kuwait en el año 1961. El jeque Sabah se proclamó Emir y asumió todos los poderes. Iraq se negó a reconocer el nuevo Estado, pues sostenía que era una creación artificial de los ingleses para conservar el acceso al petróleo. Las tropas inglesas se quedaron para defender el emirato hasta que fueran sustituidas por tropas de la Liga Árabe.

En el año 1962, se adoptó una Constitución que creó una Asamblea Nacional con cincuenta miembros elegidos a título individual por los ciudadanos mayores de 21 años cuyos padres o abuelos fueran residentes en el país antes del año 1920.

El petróleo cambió radicalmente la fisonomía del país. Los beduinos dejaron sus camellos por lujosos automóviles con aire acondicionado. La pesca de perlas desapareció. La población se asentó en ciudades nuevas, donde las mezquitas de torres estilizadas conviven con centros comerciales que desplazaron a los antiguos zocos árabes.

El nivel educativo y la esperanza de vida de los kuwaitíes se elevó. El trabajo manual y el desarrollo de la industria petrolera quedaron a cargo de trabajadores inmigrantes, que en el año 1985 casi duplicaban a la población kuwaití.

El gobierno enseguida comprendió que tanta prosperidad en una región tan pobre, podía poner en peligro su legitimidad. Ya en el año 1961 se creó el Fondo Árabe para el Desarrollo Económico, para canalizar préstamos blandos y donaciones a Países del Tercer Mundo.

Cuando la Organización de Países Exportadores de Petróleo, la OPEP, consiguió aumentar los precios en el año 1973, Kuwait aumentó de forma espectacular sus ingresos.

La mayoría de los Países del Tercer Mundo apoyó a la OPEP, con la esperanza de lograr la solidaridad para obtener de los países del Norte un “Nuevo Orden Económico Internacional”, que retribuyera mejor las exportaciones de las materias primas.

En vez de invertir los ingresos petroleros en sus propios países o en otros del Tercer Mundo, los monarcas del Golfo colocaron sus fortunas en la banca transnacional que pasó a conceder préstamos a todo Tercer Mundo, lo que encendió la mecha de la bomba de la deuda externa, que explotó en el año 1982.

A diferencia de otros países del Golfo Pérsico, Kuwait fue generoso con su riqueza. A finales de la década de 1980 era el país del mundo que brindaba mayor apoyo en asistencia oficial al desarrollo en proporción a su producto bruto.

Al estallar la guerra entre Irán e Iraq en el año 1979, Kuwait asumió una aparente posición de neutralidad pero apoyó a Iraq con grandes sumas en donaciones y préstamos. Al igual que las demás monarquías del Consejo de Seguridad del Golfo, Kuwait consideraba a Iraq como la primera línea de defensa contra la revolución islámica iraní.

El nuevo Príncipe Jabioe al-Sabah convocó a elecciones nacionales en el año 1981. Cuarenta de los cincuenta diputados que salieron de estas elecciones eran leales a la familia gobernante. Solamente el 64% de la población estaba habilitada para votar.

A finales de la década de 1980, el capital invertido fuera del país por la Oficina Kuwaití de Inversiones KIO, se estimaba en cien mil millones de dólares e incluía la propiedad de hoteles, galerías de artes y bienes raíces en Estados Unidos y Europa.

En el año 1987, alegando que el puerto de Kuwait era usado por Iraq para exportar petróleo e importar armas, Irán atacó barcos kuwaitíes. En respuesta Kuwait obtuvo el permiso de Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña para ir como pabellón de esos países a su flota mercante. Los Estados Unidos y Gran Bretaña mandaron a su marina de guerra para proteger la navegación kuwaití en el Golfo Pérsico.

Terminada la guerra entre Irán e Iraq, en el año 1988, comenzaron las tensiones con Iraq. Kuwait reclamó el pago de 15.000 millones de dólares de préstamos de guerra. Iraq se negó a pagar, alegando que había defendido a Kuwait con esas sumas.

Por su parte Iraq acusó a Kuwait de estar robándole petróleo, al bombear hidrocarburos de los yacimientos comunes, que se extienden a los largo de su frontera y le reclamó 2.400 millones de dólares.

El dos de agosto del año 1990, Iraq invadió Kuwait. El Emir al-Sabah se refugió en Arabia Saudita junto con su familia. Cerca de trescientos mil kuwaitíes huyeron del país. Un gobierno pro-iraquí encabezado por Hussein Ali pidió la fusión con Iraq. Días más tardes el Emirato fue declarado provincia iraquí.

Estados Unidos reaccionó con extrema dureza ante la invasión y promovió una serie de condenas por parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El seis de agosto se acordó un boicot comercial, financiero y militar contra Iraq y el veintinueve de agosto se autorizó la utilización de la fuerza si Iraq no se retiraba de Kuwait antes del quince de enero del año 1991.

La guerra tuvo un fuerte impacto sobre el país, no tanto en términos de vidas, pues los combates se libraron en su mayor parte en territorio iraquí sino por el incendio de la mayoría de los pozos petrolíferos durante los bombardeos, al retirarse las tropas de ocupación. A raíz del daño, Kuwait no pudo producir petróleo hasta el año 1992.

El Instituto de Investigación Científica de Kuwait señaló que 900 km2 fueron dañados por el paso de los vehículos militares, lo que ocasionó movimientos de tierras y frecuentes tormentas de arena.

El costo de la reconstrucción fue estimado entre 150.000 / 200.000 millones de dólares. Kuwait se convirtió en país deudor, en especial con sus aliados, con quienes se endeudó por 27.000 millones de dólares.

Después de finalizada la guerra, más de 1.300 personas resultaron muertas por la explosión de minas que fueron colocadas durante el conflicto.

En marzo del año1991, Amnistía Internacional denunció arrestos arbitrarios y torturas, ejecuciones sumarias de hombres y mujeres palestinos, jordanos e iraquís residentes en Kuwait por parte de soldados y civiles kuwaitíes.

Al mismo tiempo, durante la visita al país del secretario norteamericano, James Baker, el gobierno kuwaití prometió encaminar el emirato hacia la democracia.

En junio del año 1991, el jeque Jaber al-Sabah convocó un Consejo Nacional para discutir las elecciones, el voto de la mujer y la situación de los extranjeros. La oposición reclamó el restablecimiento de la Constitución del año 1962 y la formación de un Parlamento democrático. Ninguno de los líderes opositores integró el Consejo.

Bajo la consigna de rekuwaitizar Kuwait, al fin de la Guerra del Golfo, el emir propuso reducir drásticamente el número de residentes extranjeros. Consecuencia de esta política fue la expulsión de más de 300.000 palestinos.

Entre finales del año 1991 y comienzos del año 1992, Arabia Saudita, Los Emiratos Árabes Unidos, Omán. Qatar, Bahréin y Kuwait celebraron una reunión cumbre con la finalidad de crear un mecanismo de seguridad colectiva y establecer un nuevo marco defensivo para la región, que posee el 40% de las reservas de petróleo del mundo.

Luego de restablecer su producción de petróleo, el país aceptó en la OPEP una cuota de dos millones de barriles diarios. Pero en febrero del año 1993, decidió Kuwait elevar su producción a 2,16 millones de barriles diarios.

En el año 1993, la ONU delimitó la frontera con Iraq, pese a las protestas de Bagdad. Como respuesta a supuestas incursiones de tropas iraquíes, realizando Estados Unidos varios bombardeos e instaló misiles en Kuwait y se inició la construcción de un muro de 130 km de largo y la colocación de 1,3 millones de minas a lo largo de la frontera.

En el año 1994, el gobierno prosiguió con la privatización de empresas estatales y realizó importantes inversiones en armamento.

En febrero del año 1966, Amnistía Internacional denunció nuevamente ejecuciones sumarias, torturas y expulsiones sin juicio alguno. El incendio de una refinería de petróleo a inicios del año 2002 provocó dudas sobre el ministro del petróleo, quien se vio obligado a dimitir.

Luego de los atentados del once de septiembre del año 2001, contra Estados Unidos, el emir expresó su apoyo a la coalición liderada por los norteamericanos. A pesar de ellos, los atentados perjudicaron a los kuwaitíes cuando se supo que el portavoz de la red al-Queda, Suleiman Abu Ghaith, era ciudadano de este país y que otros kuwaitíes se encontraban detenidos en la base de Guantánamo.

Estados Unidos y Gran Bretaña, al frente de una coalición invadieron Iraq en marzo del año 2003 en medio de una fuerte controversia internacional. La Liga Árabe condenó unánimemente la invasión con la sola excepción de Kuwait.

Lo sucedido posteriormente es de todos conocido.

Kuwait, el reino del petróleo