sábado. 20.04.2024

Retrato de la crisis política que derivó de la guerra mediática-judicial contra Lula Da Silva, “Al filo de la democracia”, de la cineasta brasileña Petra Costa, explora las grietas y las contradicciones de los procesos históricos teniendo como punto de partida el juicio político a Dilma Rousseff.

Dirigido por Petra Costa, el documental que se estrenó el pasado miércoles en la plataforma Netflix revisa la trama de corrupción conocida como Lava Jato, un escándalo en el que estuvo involucrada toda la clase política, de derecha a izquierda, y que llegó incluso a tocar a miembros de la familia de la propia cineasta.

Esclarecedora y audaz, la película de Costa narra mediante imágenes de archivo el triunfo político de la izquierda y sus posteriores consecuencias: Dilma Rousseff destituida, Lula Da Silva en prisión; y Jair Bolsonaro, devoto de la dictadura, al frente del gobierno.

Las falsas acusaciones contra Rousseff y Lula se explican como lo que han sido: un golpe de Estado judicial y legislativo consumado mediante el uso de leyes e instituciones que, se suponía, debían ser neutrales

La voz en off de Petra Costa va trazando interrogantes para cuyas respuestas se exponen pruebas irrefutables. Obsesiva y escrupulosa, la cineasta va convirtiéndose en una suerte de investigadora que acierta al revelar los hechos ocultos del proceso que derivó en el presente de Brasil.

Lo que Costa observa y traduce a través del montaje es la historia de una épica, pero también de un complot conspiratorio y de intereses personales, de cambios de época en el poder, de traiciones, manipulaciones, odios y guerra ideológica. 

Las falsas acusaciones contra Rousseff y Lula se explican como lo que han sido: un golpe de Estado judicial y legislativo consumado mediante el uso de leyes e instituciones que, se suponía, debían ser neutrales.

La guerra mediática contra los líderes de izquierda produjo una reacción que la cámara de Costa captó y que el documental ofrece como fiel testimonio. "Orden y progreso", el lema idealista que aparece en la bandera de Brasil, es tan profundamente ridiculizado por esta escenificación de caos y retroceso que Costa se pregunta si estas palabras, en realidad, no han sido una simple broma. Imágenes de simpatizantes de Bolsonaro acribillando a balazos imaginarios a Lula y a Dilma hablan del cambio social y cultural que experimenta el país, pero también reafirman el sentido del título que Costa eligió para esta suerte de espejo en el cual se refleja lo mejor y lo peor de la democracia del Brasil.

“Al filo de la democracia”, un retrato de nuestro tiempo