A pesar del actual clima económico y de las dificultades que esto implica, FiSahara (Festival de Cine del Sáhara) ya calienta motores. La VIII edición de FiSahara tendrá lugar por quinto año consecutivo en el campamento de refugiados de Dajla, en territorio argelino, del 2 al 8 de mayo.
De los campamentos de refugiados (Aaiun, Smara, Ausserd y Dajla), la wilaya de Dajla es la más alejada, a más de 150 kilómetros de distancia, de la ciudad de Tinduf, lugar en el que aterrizan los dos vuelos chárter que fleta FiSahara para llevar a los asistentes.
La que se ha convertido en sede de FiSahara se encuentra al otro lado del Muro de la Vergüenza levantado por Marruecos, en territorios ocupados en los que el pasado mes de noviembre el Gobierno marroquí desmanteló el campamento Gdeim Izik.
La gran Pantalla del Desierto en la que se proyecta el cine al aire libre, ha convertido a FiSahara en el único Festival de Cine del mundo que se realiza en un campamento de refugiados.
"FiSahara es un festival especial, que se solidariza con el pueblo saharaui llevando ocio y cultura a mucha gente que nunca ha visto cine en una pantalla grande"José Taboada, codirector de FiSahara, es tajante al asegurar "el compromiso que todos los años ha tenido el Festival con la hospitalidad y la seguridad de los asistentes, que este año esperamos que vuelvan a superar los 300 visitantes"
Taboada lanza un mensaje de tranquilidad y anima a todos los interesados a acudir a Dajla, insistiendo en que "FiSahara es un festival especial, que se solidariza con el pueblo saharaui llevando ocio y cultura a mucha gente que nunca ha visto cine en una pantalla grande".
Asimismo, el codirector insiste en la idea de "festival de convivencia" que subyace bajo este proyecto de cooperación, en el que durante una semana "el pueblo saharaui nos acoge a todos en sus propias jaimas".
"El pueblo saharaui nos acoge a todos en sus propias jaimas"Por su parte, Jadiya Hamdi, ministra de Cultura de la RASD (República Árabe Saharaui Democrática), ha corroborado las palabras de Taboada al afirmar que "nuestro compromiso con la continuidad de este festival es absoluto pues, tras siete ediciones, se ha convertido en un elemento imprescindible para la causa saharaui, a la que este año vuelven a sumarse artistas españoles de primer nivel".
