jueves. 28.03.2024
envid

En la mitología romana Envidia es la diosa que personificaba los celos y la venganza. En la metamorfosis de Ovidio aparece de forma estelar Envidia, como personificación de los ceos y de la venganza divina.

Envidia aparece de nuevo en el mito de Narciso y Eco. Narciso era un joven muy atractivo del que se enamoran chicos, chicas e incluso ninfas, entre ellas Eco. Esta ninfa había sido castigada por Juno a poder pronunciar solo la última parte de lo que otros decían, por haber rechazado con sus palabras a Júpiter. Eco enamorada de Narciso, pero con la limitación de su voz, terminó apagándose por la pena hasta que de ella sólo quedó su voz. Después una muchacha desconocida enamorada de Narciso y rechazada por este, por sus celos y despecho pidió a Envidia que algún día Narciso sufriera en carnes propias el dolor del amor rechazado. Así fue como Narciso un día, bajo la influencia de Envidia, bebiendo agua de un rio se vio reflejado en ella y se sintió perdidamente atraído por su propio reflejo. Viendo Narciso que no podía poseer a la persona deseada, acabó arrojándose al río y los dioses le trasformaron en la flor que lleva su nombre.


El complejo de Prometeo


Propongo que en Psicología se hable de complejo de Envidia para referirse a un tipo de personalidad que suele manifestar dudas de la fidelidad de su pareja. Los celos como otros sentimientos del ser humano (tristeza, alegría, enojo…) forman parte del sentir de cada persona. Sentir celos pues, de una manera moderada no constituyen un trastorno en sí mismo. Estos celos se convierten en algo desadaptativo cuando la sensación de malestar es tan absorbente que se vuelve en un elemento negativo para la relación de pareja y el bienestar personal.

Compartir esta reflexión de Diógenes Laercio en el siglo III a.c.: ”La envidia es causada por ver a otro gozar con lo que deseamos; los celos, por ver a otro poseer lo que quisiéramos poseer nosotros”

Que rasgos caracterizan a una personalidad celosa?. En general, son personas inseguras, lo que les hace muy dependientes de sus parejas. Por otro lado, son muy desconfiados en general, rasgo que se acentúa con respecto a la pareja. Su baja autoestima facilita la aparición de los celos, ya que piensan que cualquier posible rival tendrá más valía que él. Son personas introvertidas con dificultad para las relaciones interpersonales, lo que también contribuye a la dependencia de su pareja. Experiencias anteriores de pareja en la que ha sufrido una infidelidad pueden contribuir a poner en marcha los celos junto a lo descrito anteriormente.


Complejo de Hera


envLos celos suelen empezar de una manera discreta con una sutil desconfianza de la pareja que va incrementándose y genera un malestar que lleva a la persona a aumentar la vigilancia sobre su pareja, con conductas comprobatorias de móviles, mail, redes sociales etc. Estas conductas comprobatorias pueden al principio aliviar la angustia de la persona celosa, pero este alivio es pasajero, y volverá de nuevo a esas conductas comprobatorias

Hay una forma extrema de celos patológicos que corresponden al síndrome de Otelo, donde aparecen unos celos delirantes, celotipia. Como trastorno delirante que es, las ideas de celos son falsas, irrebatibles al argumento lógico y producto de un trastorno psicológico.


Complejo de Hestia


Para concluir, es necesario diferenciar entre envidia y celos. Para Melanie Klein, notable psicoanalista postfreudiana, que se centró en esta distinción, teorizando que la respuesta a la diferencia basada en la emoción tripersonal de los celos: “temor a que a uno le retiren el amor y se lo entreguen a un rival”, no es la misma que la fuerza bipersonal de la envidia destructiva: “el sentimiento de enfado porque otra persona posee y disfruta algo deseable, siendo el impulso envidioso quitarle ese algo o estropeárselo”. En definitiva, los celos representan el sentimiento que se genera de perder alguien valioso y que pase a manos de otro, mientras que la envidia hace referencia a la reacción negativa que alguien tiene por poseer algo que otro si tiene.

Por último, compartir esta reflexión de Diógenes Laercio en el siglo III a.c.: ”La envidia es causada por ver a otro gozar con lo que deseamos; los celos, por ver a otro poseer lo que quisiéramos poseer nosotros”

Complejo de Envidia