jueves. 25.04.2024

200 años con Poe

SUSANA IVÁN
Hoy, 200 años después de su nacimiento, Edgar Allan Poe sigue ocupando un puesto privilegiado en el mundo de las letras. Sus textos no han perdido ni un ápice de la fuerza que los convirtió ya entonces en referencias, los temas que abordó siguen gozando del favor del público, con el que engancha de forma casi inmediata.
NUEVATRIBUNA.ES | 30.1.2009

Hace poco más de 200 años nacía una de las grandes figuras de la literatura norteamericana y, sin duda alguna, universal. Nacido en el seno de una familia de Boston descendiente emigrantes irlandeses, Edgar Allan Poe conoció pronto la tragedia, al ser abandonado por su padre 1 año después de su nacimiento y sufrir la muerte de su madre en 1811. Sin embargo, una familia acomodada de la ciudad se hizo cargo del pequeño, de la que obtuvo no sólo cuidados y educación, sino también el sobrenombre Allan.

Crítico, periodista y novelista, fue el primer autor norteamericano que hizo un serio intento por vivir de lo que escribía, utopía a la que hoy día siguen aspirando la mayoría de los autores publicados sin conseguirlo. Tampoco él fue una excepción, y su vida no estuvo nunca rodeada de la holgura económica necesaria. Sin embargo, no fue en absoluto un autor desconocido en su tiempo. Textos como “Las narraciones de Arthur Gordon Pym”, “Los crímenes de la calle Morgue” o sus relatos fantasmagóricos fueron bien recibidos por el público y la crítica americanas, hasta el punto de que su poema “El cuervo” se convirtió en un éxito popular inmediato, encumbrándole al Olimpo de los escritores. Curiosamente, Poe solo obtuvo 9 dólares por su publicación, y la inexistencia de una Ley de Copyright dificultó hasta límites inconcebibles su deseo de obtener mayores ingresos por ninguna de sus obras.

Hoy, 200 años después de su nacimiento, Edgar Allan Poe sigue ocupando un puesto privilegiado en el mundo de las letras. Sus textos no han perdido ni un ápice de la fuerza que los convirtió ya entonces en referencias, los temas que abordó siguen gozando del favor del público, con el que engancha de forma casi inmediata. Y si bien algunas de las situaciones han quedado anticuadas por el paso del tiempo, los personajes siguen siendo tan sólidos y palpables como hace casi dos siglos.

La conmemoración del bicentenario de su nacimiento convierte a 2009 en el año de Poe. Estados Unidos rendirá sentido, y merecido, homenaje a uno de sus grandes literatos, y el resto del mundo no será tampoco ajeno a ello. En nuestro país son ya muchas las reediciones que se pueden encontrar en los estantes de las librerias. Antologías ilustradas de sus relatos, recuperaciones de textos quizás menos conocidos por el público, como “El gato amarillo”, pero no menores en calidad, nuevas ediciones comentadas con prólogos de otros grandes de la literatura, como Julio Cortázar. Páginas y páginas de calidad que se ofrecen al lector. Los seguidores de Poe, que hoy siguen siendo numerosos, podrán ampliar sus bibliotecas con nuevos volúmenes de cuidados contenidos, y aquellos que se acerquen por primera vez al genio podrán disfrutar no sólo de él, sino también de la admiración que su figura suscita en escritores, editores y periodistas.

Nunca como en 2009 estuvieron tan vivos Poe y sus obras. Sin duda, este es el año en el que el disfrute de ellas se adivina casi como obligatorio.

200 años con Poe