Si por algo es conocida España en el mundo entero es por la picaresca. Más allá del Lazarrillo de Tormes, la necesidad es lo que mueve a las personas y la crisis económica que sacudió al país desde el año 2008 agudizó (y mucho) este sentido. Por ley se exige a quien tenga un vehículo propio que cuente, como mínimo, con el seguro básico (aunque los seguros de coche se pueden adaptar tanto como se requiera, ya que cuentan con diferentes coberturas) Y es la mejor alternativa para poder estar tranquilos ante imprevistos que tengan que ver con el vehículo (como un accidente o un robo) Lo que ocurre es que algunos han ido más allá, como comentamos, y han desarrollado una serie de timos ante los que hay que estar alerta. Estos son los más destacados.
- Se pone a la venta un coche que ni siquiera existe. Internet ofrece un mundo de posibilidades, pero también amplia el espectro de quienes quieren estafar. En este sentido, en realidad, resulta muy sencillo hacerlo. Basta con poner un anuncio a la venta de un vehículo que resulte llamativo y pedir que, antes de seguir con la compra, se lleve a cabo un ingreso (en concepto de señal) para reservarlo. Siempre hay que desconfiar de los anuncios que parecen ser demasiado buenos. Si ocurre, siempre hay que alertar a las autoridades. Pero, por lo general, esos coches que no pueden verse porque el propietario está en otro país y sólo piden dinero por adelantado, mejor olvidarlos.
- Averías inexistentes. Ocurre que algunos talleres se aprovechan de sus clientes para engrosar la factura, inventando problemas o creándolos cuando antes no los había. Lo mejor es rellenar el parte del seguro (cuando proceda) uno mismo y solicitar al seguro el parte que haya firmado el perito para confirmar lo que se necesitaba reparar.
- Uso de piezas usadas. Solicita siempre en el taller que te muestren la factura de la compra de las piezas para no pagar por algo nuevo cuando no lo es.
- Falso vendedor de seguros. Lo mejor es optar siempre por empresas que den confianza para evitar estos problemas.
- El cuentakilómetros retocado. Cuando se va a adquirir un vehículo de segunda mano, además del estado del mismo, se tiene en cuenta cuántos kilómetros se ha hecho con él. Es una manera sencilla de ver si se le ha dado o no mucho uso. Algunas personas retocan estas cifras para conseguir más dinero.
- Venta de un coche robado. Es una manera fácil de sacar dinero. Le roban el coche a alguien y se lo venden a un tercero. Siempre hay que asegurarse de que toda la documentación está en orden.
- Falso policía. Si un agente da el alto siempre hay que tratar de visualizar que lleva el uniforme correspondiente y que el vehículo es como los reglamentarios.
- Documentación falsificada. El mejor consejo es no mandar nunca información personal vía email,ya que algunas personas usan esos documentos para llevar a cabo delitos.
- Intermediarios. Similar al punto uno. Pedirán un pago para llevar a cabo la reserva. Lo mejor es no fiarse de este tipo de anuncios.
- Cheque sin fondos. Antes de aceptar ninguna compra por este medio siempre hay que comprobar que hay dinero en la cuenta vinculada.
