jueves. 28.03.2024
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La Comisión Interamericana de Derechos Humanos exhortó al gobierno argentino a dar pronta respuesta a la resolución del grupo de la ONU que reconoce la arbitrariedad de la detención de la dirigente social Milagro Sala.

Milagro Sala, líder de la agrupación Tupac Amaru, está detenida desde enero de 2016 por un acampe y protesta contra el gobernador de la provincia de Jujuy, Gerardo Morales. El grupo de trabajo de Naciones Unidas calificó el arresto de Sala como arbitrario, pidiendo su liberación inmediata o la adopción de medidas alternativas a la detención preventiva, como el arresto domiciliario. La dirigente social está alojada en la Unidad 3 de Mujeres del Servicio Penitenciario de la provincia de Jujuy, conocida como “Penal del Alto Comedero”.

El juez español Baltasar Garzón visitó a Sala recientemente y explicó que el hecho de que la líder social esté presa es “una cuestión neta, absoluta y exclusivamente política. La prisión preventiva que sufre no tiene ninguna justificación de acuerdo con estándares nacionales e internacionales de derechos humanos”.

Baltasar Garzón llegó hasta el penal jujeño en junio pasado, acompañado por el diputado del Peronismo para la Victoria (Movimiento Evita) Remo Carlotto, quien ratificó el compromiso “de trabajar en la Argentina y en la comunidad internacional para que se consiga la libertad” de la dirigente social detenida por causas impulsadas argpor Gerardo Morales, gobernador radical y principal aliado político del gobierno nacional en el norte. “La Argentina es un país menos democrático desde el día que está detenida Milagro y el resto de los presos políticos”, sostuvo Garzón.

Mediante un comunicado, el organismo dependiente de la OEA señaló que Sala "es una conocida líder de la sociedad civil" y que fue detenida "en el contexto de una protesta social".

En este documento la Comisión Interamericana de Derechos Humanos indicó que "la protesta es un ejercicio legítimo de la libertad de expresión que debe ser facilitado y no sujeto a criminalización u otras formas de represión", además de recordar recientes manifestaciones del titular de la OEA, Luis Almagro, en favor de la liberación de Sala.

Desde el Gobierno indicaron que "toman nota de lo señalado en dicho comunicado y, tal como se hiciera con la opinión que emitiera el Grupo de Trabajo del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, se notificará de inmediato su contenido a la Justicia de la provincia de Jujuy para su conocimiento y acción, para que tome la intervención que corresponda".

A su vez, el comunicado de la Cancillería manifestó que el país "ha adoptado todas las medidas a su alcance de conformidad con las normas constitucionales aplicables, con las especificidades propias de un Estado federal". "La Argentina, como indica el comunicado de la CIDH, reafirma su compromiso histórico con el Sistema Interamericano de Derechos Humanos y su voluntad de seguir trabajando en conjunto con los Organismos Internacionales", señaló el ministerio encabezado por Susana Malcorra para agregar que "confía que la Comisión aceptará la invitación que se le formulara para visitar la Argentina y en particular Jujuy a fin que sus integrantes puedan tomar contacto directo con los distintos actores y sectores sociales, políticos y judiciales de dicha provincia que se encuentran vinculados al caso de la Sra. Sala".

Mientras el oficialismo da la espalda a los continuos reclamos internacionales por la libertad de Milagro Sala, el presidente argentino insiste en manifestar su compromiso con los Derechos Humanos. 

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