Domingo, 2 de abril de 2023. Hoy era el día donde “Empieza todo”. Gran puesta de largo del proyecto Sumar con Yolanda Díaz a la cabeza. El polideportivo Antonio Magariños en Madrid repleto de gente. Largas colas para entrar desde primeras horas de la mañana. Con un aforo de 3.000 personas y otras 2.000 que se han quedado a las puertas según los organizadores. La política gallega hacía su entrada coreada con aplausos y gritos de ¡presidenta! ¡presidenta! En el escenario le esperaba una marea de fotógrafos y en primera línea destacados dirigentes de la izquierda y la más que visible ausencia de los miembros de la cúpula de Podemos con los que no se ha podido salvar el desencuentro tras una semana de conversaciones y mensajes cruzados.
“Quiero convertirme en la primera presidenta del Gobierno de mi país”
Yolanda Díaz ha dado un paso al frente. Después de siete meses embarcada en un “proceso de escucha” que le ha llevado a 17 comunidades autónomas y 20 ciudades, con la celebración de 25 actos y otros tantos a nivel sectorial que han congregado a 30.000 personas, 20.000 km recorridos y el trabajo de los grupos conformados para hacer “un proyecto de país para la próxima década”, la vicepresidenta segunda del Gobierno ha anunciado su intención de ser candidata en las próximas elecciones generales. “Quiero convertirme en la primera presidenta del Gobierno de mi país”, ha dicho ante un público entregado. Y lo quiere hacer sin “tutelas”, con total autonomía e independencia a la hora de liderar y conducir la plataforma y sus posibles confluencias en tiempo y forma.
En un alegato por la “España de las mujeres” y por un “país feminista”, Díaz ha reivindicado su libertad para pilotar este nuevo proyecto político: “Yo no soy de nadie”, ha dicho, en lo que se ha entendido como un claro mensaje lanzado a Podemos. Una libertad que extiende al resto de mujeres “cansadas de tutelas” y aún “con la preposición ‘de’ pegada a nuestro nombre para marcar nuestras adhesiones y nuestras deudas”, pero las mujeres -ha enfatizado-, “no pertenecemos a nadie más a que a nosotras mismas”.
“Las mujeres no pertenecemos a nadie más a que a nosotras mismas”
Especial peso también han tenido en su discurso las “gracias” reiteradas a los dirigentes políticos que han querido acompañarla en este arranque de Sumar con la vista puesta en las elecciones legislativas de finales de año. A ellos se ha dirigido con elogios uno por uno: Ada Colau, Joan Ribó, Alberto Garzón, Enrique Santiago, Mónica García, Rita Maestre, Íñigo Errejón, Juantxo Uralde… más de una decena de partidos presentes, delegaciones de CCOO y UGT y representantes del mundo de la cultura, entre otros colectivos sociales, además de un elenco de cargos de Podemos. Y la gran telonera, Carla Antonelli, que tras su marcha del PSOE, recobra protagonismo de la mano de Yolanda Díaz a la que augura un futuro prometedor: “Ya toca una mujer presidenta en este país: vas a ser tú, Yolanda”, ha dicho levantando aún más el entusiasmo del público.
Yolanda Díaz quiere hacer “política de verdad”, política “útil”, política “con mayúsculas”, con “honestidad”, estando “a la altura”, con un proyecto en el que “caben todos”, dejando a un lado la política del “ruido” y la “polarización”. Sumar -según ha dicho- es una fuerza feminista, ecologista que llega para “ganar el país” y “ensanchar la democracia”. La también ministra de Trabajo se ha comprometido a trabajar con “entrega” y “generosidad” y ha avanzado algunas de las líneas programáticas de lo que ha venido a llamar un nuevo “contrato democrático” y una “carta de derechos” basada en la defensa de los servicios públicos, con especial hincapié en la sanidad, pero también en los derechos laborales, en la vivienda, en la cultura, en los cuidados, con una apuesta clara por la juventud del país y una posición férrea ante la ofensiva neoliberal de las políticas marcadas por formaciones de la derecha como el PP al que ha llamado “el partido del no”.
Estas son sus credenciales, para muchos la esperanza ‘blanca’ de la unidad a la izquierda del PSOE, atento también a cómo se suceden los acontecimientos en un proceso que está llamado a poder garantizar o no la reedición del Gobierno de coalición. Pero aún hay fichas que mover e importantes claves por despejar, principalmente con relación a Podemos cuya secretaria general y ministra de Asuntos Sociales, Ione Belarra, puso en valor, este mismo fin de semana, el papel jugado por la formación morada desde sus inicios, trabajando para “construir un espacio amplio, unido y plural”.
Y ahí parece que estemos de nuevo, en la casilla de salida.