jueves. 28.03.2024
empleadas hogar

Las personas dedicadas al trabajo del hogar y los cuidados sigue siendo un colectivo altamente precarizado. La mayoría son mujeres con salarios muy por debajo de la media cuya situación no solo no ha mejorado en los últimos años, sino que se ha visto empeorada por el estallido de la pandemia, pese a ser considerado como esencial.

Este 16 de junio se cumplen 10 años de la aprobación del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre trabajo decente para los trabajadores y trabajadoras domésticas. Desde entonces, han sido 32 los países que lo han ratificado, 8 de ellos estados miembros de la Unión europeo. Pero España no está entre ellos. 

Este 2021 también se cumple una década de la entrada en vigor de una nueva regulación en materia de Seguridad Social y laboral para las trabajadoras domésticas, pero aún no se ha desarrollado lo suficiente para equipararlas a la del resto de trabajadores.

Así lo expone UGT en su informe 'Trabajo del hogar y cuidados. Una década sin avances. Otra década de precariedad’ dado a conocer este miércoles. El sindicato reclama la ratificación del Convenio de la OIT y la convocatoria urgente de la mesa de diálogo social para abordar las modificaciones necesarias tanto en materia laboral como de seguridad social.

El informe refleja que el salario bruto medio total para el personal doméstico es un 56% inferior al salario medio de todas las ramas de actividad. En el caso de la jornada completa, perciben un 41,7% menos y el 39,7% en el caso de la jornada a tiempo parcial.

Desde 2011, ha habido un incremento de la jornada a tiempo parcial, que de suponer el 52% del total de personas asalariadas en 2011 ha pasado al 57% en el 2019, mientras que en conjunto de la población asalariada el trabajo a tiempo parcial representa el 16,1%.

En la jornada de trabajo de esta actividad también hay una acusada diferencia entre mujeres y hombres. En el año 2019 había 595.200 personas ocupadas en actividades de los hogares como empleadores del personal doméstico. De ellas, 522.300 mujeres, el 87,8% del total. Pero mientras que el 59,1% de las mujeres trabajan a tiempo parcial, en el caso de los hombres el porcentaje apenas supera el 25%. Esto conlleva que los salarios percibidos por los hombres sean relativamente más elevados (teniendo en cuenta que el 75% de los hombres ocupados en esta actividad lo están a tiempo completo, frente a un 40,9% de las mujeres).

Pese a la regulación aprobada en 2011 para que el Régimen Especial de la Seguridad Social de los Empleados de Hogar se integrara en el Régimen General como Sistema Especial lo que provocó un repunte de la afiliación principalmente entre 2001 y 2012, en los siguientes años, la tendencia fue a la baja.

Por todo ello, UGT reclama:

-Establecer un sistema de protección por desempleo
-Eliminar la figura del desistimiento
-Incluir a estas trabajadoras en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales
-Regular mejor las horas de presencia para que estas no se conviertan en extensiones de jornada de trabajo encubiertas
-Regular el trabajo nocturno
-Equiparar el tratamiento de la Incapacidad Temporal con el resto de trabajadores y trabajadoras
-Especificar que tareas no deberían ser parte del trabajo doméstico

A juicio del sindicato también es necesario un aumento de las inversiones en protección social, para que este sector deje de cubrir necesidades sociales que son o deberían ser responsabilidad de las Administraciones Publicas; así como la extensión de la “Ley Rider” a otras plataformas digitales que hacen uso de la figura de los autónomos o de la relación laboral especial de forma fraudulenta.

Empleadas del hogar cobran menos de la mitad del salario medio en España