viernes. 29.03.2024

Sr. Ábalos:

Yo no sé si tiene usted alguna responsabilidad penal en los hechos denunciados por Izquierda Unida ante la Fiscalía Anticorrupción. Lo más probable es que no, en primer lugar porque, de entrada, le avala nuestra Constitución y, además, porque le ha faltado tiempo a usted para decir que no tiene ninguna responsabilidad, ni penal ni, casi, de ninguna otra naturaleza, en que la Operación Chamartín vaya a ser, no ya la operación urbanística más importante de España, sino el mayor pelotazo especulativo de Europa.

Y ya nos adelantó algo sobre su exculpación cuando compareció en el Congreso de los Diputados, en el mes de enero de 2019, para decir a Sus Señorías que había hecho la enésima novación del contrato con el BBVA debido a que el Ayuntamiento de Madrid había aprobado cambios en el urbanismo. Era un momento oportuno para que hubiera explicado que esas fotos que se hacía con el investigado Bejar, estaban motivadas por una serie de ventajas, todas ellas, de interés general. En lugar de ello, le echó la culpa a la Sra. Carmena. Que, obviamente, también forma parte del club de fans del BBVA, pero que no tiene nada que ver en las relaciones entre ese banco y ADIF que es lo que le preguntaron en esa comparecencia.

Ahora, lejos de contarnos alguna de las ventajas del asunto, ha profundizado usted en el excusatio. Según usted, no solo es responsable de todo lo que tenga que ver con la Operación Chamartín la Sra. Carmena, sino toda una legión de funcionarios públicos, y personal contratado, del Ministerio de Fomento, de ADIF y de Renfe Operadora, que han examinado antes que usted los papeles que envía el BBVA para que ustedes los tramiten. Y puede que tenga razón. Sobre todo si usted lo dice. Pero, en ese caso, debe ocurrir que en ADIF hacen la guerra por su cuenta. O, lo que es más probable, hagan lo que les diga el BBVA que tienen que hacer.

Aunque, yo, en nombre de terceros como enseguida verá, le voy a reclamar alguna responsabilidad. No de naturaleza urbanística, que no tiene usted porqué entrar en ello. Ni en materia administrativa, que ahí sí que tienen mucho que decir esa multitud de personas que trabajan a sus órdenes. Ni -vuelvo a referirme a su presunción de inocencia- en materia penal.

Me refiero a su responsabilidad política y, en concreto, a dos cosas que he escuchado, a Rafael Simancas, el día 28 de enero de 2019 en el Congreso de los Diputados y a Pepu Hernández y Mercedes González, portavoces del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, en diversas ocasiones. Me refiero a que la Operación Chamartín, según ellos, tendría que ser ejecutada por un consorcio público y el 50% de sus viviendas deberían tener algún grado de protección.

Entiendo, Sr. Ábalos, que lo del consorcio público no le agrade, a pesar de la experiencia exitosa en los años ochenta del Pasillo Verde Ferroviario en la misma ciudad de Madrid. Y lo entiendo porque, al simultanear usted su oficio de Ministro con el de Secretario de Organización de su partido, no tendrá usted tiempo para más tareas y prefiera que sea el BBVA quien se encargue de gestionar la Operación Chamartín. Eso, como digo, lo puedo comprender.

Sr. Ábalos, si usted hace de la Dirección General de Arquitectura, Vivienda y Suelo algo inútil y, luego, lo quieren convertir en Ministerio, ¿cómo les puede extrañar que el Sr. Iglesias lo considere 'la caseta del perro'?

Lo que me cuesta más de entender, Sr. Ábalos es que no haya usted tomado la decisión de que, sobre suelo público, se construya el mayor número posible de viviendas sociales. Es usted Ministro de Fomento, donde hay una Dirección General llamada de Arquitectura, Vivienda y Suelo que no es que tenga muchas competencias pero, al menos, su título le debería estimular a la construcción de viviendas sociales en España. Porque, además, el suelo que le quiere vender al BBVA es público, todavía. Por otra parte, el Ayuntamiento de Madrid, como cualquier otro ayuntamiento, solo puede obligarle a hacer un mínimo de viviendas sociales, pero no le puede prohibir que haga más. Por eso, usted, Sr. Ábalos podría haber decidido, es un suponer, hacer el 100% de viviendas protegidas.

Bueno, es un suponer además, posiblemente, de una exageración. Pero, un 50%, sin esperar que los tribunales terminen diciéndolo, sí que pudiera usted haber decidido hacer, siguiendo el criterio de sus Portavoces en el Congreso de los Diputados y en el Ayuntamiento de Madrid, Sres., Simancas y  Fernández y Sra. González, respectivamente.

Para eludir esta responsabilidad política que le atribuyo, no tiene usted el parapeto de la Sra. Carmena ni de nadie. Depende, dependía, de usted. Si acaso, solo se me ocurre una razón para esa racanería en materia de vivienda social: si hubiera usted, Sr. Ábalos, haber optado por el citado 50%, el BBVA, muy posiblemente, hubiera vuelto a sus quehaceres financieros y renunciado a la Operación Chamartín. Sencillamente por falta de una rentabilidad de tipo pelotazo.

Y eso, Sr. Ábalos es, a lo mejor, lo que usted no quería: que el BBVA, después de dar el pase en cuanto pueda a esos derechos gaseosos que han negociado con ustedes, le deje a la Presidenta de ADIF sin el sueño de ingresar esos supuestos 1.300 millones de euros en, eso sí, veinte años que, políticamente hablando, no es una vida, sino cinco vidas de esas de cuatro años de duración en que se divide el universo político.

Pero, claro, si usted hace de la Dirección General de Arquitectura, Vivienda y Suelo algo inútil y, luego, lo quieren convertir en Ministerio, ¿cómo les puede extrañar que el Sr. Iglesias lo considere "la caseta del perro"?


Jesús Espelosín | Autor del libro “Operación Chamartín. Historia de una realidad virtual”.

Sr. Ábalos, dos puntos