viernes. 29.03.2024
LA PRÓXIMA SEMANA EN LA MONCLOA

Sánchez convocará a patronal y sindicatos para formalizar la apertura del diálogo social

También está previsto un primer encuentro de sindicatos y empresarios para marcar el “procedimiento” a seguir de la hoja de ruta marcada por el Gobierno.

dialogo social
(Imagen de archivo) Encuentro de Sánchez con los agentes sociales en julio de 2018.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convocará la próxima semana a los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez y a los presidentes de CEOE, Antonio Garamendi, y Cepyme, Gerardo Cueva, para visualizar y formalizar la apertura del diálogo social tras el acuerdo alcanzado para subir el salario mínimo. A esta reunión también asistirá la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

Así lo han confirmado a Nuevatribuna.es fuentes sindicales en la que será la primera foto con el jefe del Ejecutivo de la recién arrancada legislatura.

La fecha está aún por determinar, pero se prevé que pueda ser el jueves 30 de enero en La Moncloa.

También está previsto un próximo encuentro entre los líderes sindicales y los representantes empresariales para acordar la hoja de ruta de las reformas marcada por el Gobierno.

Esta sería la primera reunión al más alto nivel de los agentes sociales tras más de un año de parón por la inestabilidad política y los procesos electorales. De hecho, el último encuentro bipartito se celebró en diciembre de 2018.

Fuentes sindicales reconocen lo “deterioradas” que estaban estas relaciones, pero la subida del SMI ha sido un punto de inflexión en este largo periodo de desencuentros, la fórmula para romper el hielo e iniciar una senda de negociación que abordará de manera prioritaria y, en muchos casos con carácter de “urgencia” -tal y como ha asegurado la ministra Yolanda Díaz-, los asuntos pactados por el PSOE y Unidas Podemos en su programa de gobierno.

Se prevé que en esa reunión se acuerde la forma y fondo de esta nueva senda del diálogo social. Servirá para precisar los temas, adelantados ya en parte por la ministra, y para marcar el “procedimiento” a seguir en las sucesivas mesas de diálogo.

Patronal y sindicatos deben dar respuesta a la prerrogativa del Gobierno, que no es otra que conseguir que arranque este diálogo pospuesto durante mucho tiempo, con el objetivo de alcanzar acuerdos sobre la derogación de la reforma laboral o la aprobación de un nuevo Estatuto de los Trabajadores. El mensaje de Moncloa es claro: queremos acuerdo dentro del diálogo social, lo queremos rápido y, si no lo hay, aplicaremos igualmente las propuestas del acuerdo programático.

Mientras los sindicatos están muy por labor de protagonizar en primera línea la agenda laboral marcada por la nueva ministra, los empresarios también se han subido al carro, pero con menos entusiasmo. El acuerdo del SMI ha dejado descolocado a más de uno, pero lo que se ‘vende’ desde la patronal es que podría haber sido peor ya que la intención inicial era llegar a los 1.000 euros este año, no a los 950. Además, lo que no ha salido de este primer acuerdo es la senda o calendario de incrementos de los tres próximos años, con la meta puesta en los 1.200 euros, esto es, el 60% del salario medio, tal y como establece la Carta Social Europea y en lo que se ha comprometido este Gobierno.

Es decir, ni subida a 1.000, ni compromiso firmado para las sucesivas subidas, lo que otorga cierto margen de acción a los empresarios.

El despido por enfermedad "no es negociable"

La ministra Yolanda Díaz ha establecido dos fases para aplicar su agenda de reformas. La primera abordará los temas que, a su juicio, son improrrogables, tales como la derogación del artículo 52 apartado D del Estatuto de los Trabajadores sobre el despido por bajas médicas, un asunto sobre el que ella misma ha recalcado que “no es negociable”. Si bien, la ministra ha adelantado que el decreto para esta derogación está prácticamente listo no es previsible que pueda ser llevado al próximo Consejo de Ministros del martes 28 de enero.

La alarma generada tras una sentencia del Tribunal Constitucional validando el despido incluso con bajas justificadas por enfermedad ha puesto este asunto en la primera línea de la agenda laboral del gobierno. El artículo referido en vigor choca frontalmente con otras sentencias europeas como la del TJUE que declaró nulo el despido de un trabajador

Pese a ello, el TC estimó que el despido por bajas cortas pero intermitentes y aún justificadas es causa de despido objetivo. La respuesta de los sindicatos no se hizo esperar y a finales de noviembre pasado anunciaban un calendario de protestas en defensa de los derechos de los trabajadores.

Otros asuntos de "urgencia"

Otros de los asuntos de “urgencia” son los relativos a la ultractividad de los convenios, la prevalencia de los convenios sectoriales sobre los de empresa, las subcontratas, la externalización, en definitiva, lo que se ha venido en llamar como los aspectos “más lesivos” de la reforma laboral del PP de 2012.

El resto de temas quedarán ralentizados para esa “segunda fase”, donde se abordará la causalidad de los contratos, los tipos de contratos, la indemnización por despido, la protección por desempleo, la protección social, etc., además de la reforma integral del Estatuto de los Trabajadores, o la propia reforma del Código Penal, para discriminalizar el derecho de huelga tal y como vienen reclamando desde hace tiempo los dos principales sindicatos.

En todo caso, el diálogo social ha echado a andar en un nuevo tiempo que se abre de “derogación”, “desmontaje” o “reformas parciales”, llámese como se quiera, aunque habrá que esperar al balance de los logros.

Sánchez convocará a patronal y sindicatos para formalizar la apertura del diálogo social