“Vamos a tener semanas difíciles, las vamos a tener”, ha reconocido el presidente del Gobierno en su primera comparecencia pública por la crisis del coronavirus.
Pedro Sánchez comparecía este martes ante los medios en el Palacio de la Moncloa tras participar en la reunión extraordinaria del Consejo Europeo celebrada por videoconferencia y de la que ha salido el compromiso de la UE de activar un fondo con 25.000 millones de euros.
El presidente del Gobierno español ha pedido a las autoridades comunitarias flexibilidad fiscal para aprobar ayudas a las empresas en España, o lo que es lo mismo: cierto margen de maniobra para flexibilizar las normas del pacto de estabilidad y crecimiento.
Este ha sido uno de sus compromisos, las ayudas a trabajadores y pymes, principales damnificados por las medidas restrictivas adoptadas en las últimas 48 horas para frenar la emergencia sanitaria.
Sánchez ha prometido líneas de crédito, mediante mecanismos como el ICO, y moratorias y aplazamientos para el tejido productivo del país.
“Nos encontramos ante una emergencia sanitaria global y las respuestas eficaces han de ser globales”, ha advertido, si bien ha lanzado un mensaje de esperanza para superar esta crisis de dimensiones no solo sanitarias sino también económicas: “Haremos lo que haga falta, donde haga falta y cuando haga falta”, ha afirmado.
48 horas después de que el Gobierno haya anunciado medidas drásticas para frenar la epidemia causada por el coronavirus, el presidente ha justificado estas decisiones por criterios “estrictamente científicos”. Reconoce desconocer la evolución que tendrá la crisis en los próximos días o semanas pero asegura que la coordinación de las respuestas se hará siempre con las comunidades autónomas y el resto de administraciones públicas y siempre bajo criterios científicos.
Sánchez pide cooperación a empresas y ciudadanos ante el impacto económico y sobre la salud que está teniendo esta epidemia: “Nuestro objetivo es frenar la extensión del coronavirus”, ha afirmado y ha pedido la máxima colaboración de la sociedad civil para preservar -en primer lugar- la atención a las personas más vulnerables.
