viernes. 19.04.2024
bolsonaro

Luego de las versiones que circularon hace unas semanas respecto de la no asistencia de Jair Bolsonaro a la Asamblea General de la ONU, el primer mandatario de Brasil partió ayer rumbo a New York, no sin antes advertir a la prensa de su país que dirá la verdad “sobre las falsas acusaciones que Emmanuel Macron y Ángela Merkel le atribuyen por los incendios forestales de la Amazonia”.

Bolsonaro, que desmintió el rumor de su posible ausencia en la cumbre por el clima diciendo que asistiría “en silla de ruedas, si hiciera falta”, anticipó que está decidido a demostrar que sobre la soberanía de Brasil pesan intereses de grupos que exageran la magnitud de las quemas que este año fueron “similares” a las sucedidas en la última década.

Bolsonaro deberá demostrar con pruebas las supuestas falacias sobre el desastre medioambiental provocado por una política que desreguló los controles e incentivó la desforestación. Y deberá hacerlo delante de representantes de más de más de 190 países que tomarán parte en la sesión inaugural de la Asamblea. Lo cierto es que los incendios ocurridos en agosto fueron 300 por ciento más destructivos que los de hace un año, según dio a conocer el Instituto Brasileño de Pesquisas Espaciales (INPE), cuyo director fue depuesto, acusado de divulgar datos que "afectan la imagen de Brasil".

Bolsonaro intentará demostrar que, tal como ha señalado en reiteradas oportunidades, el calentamiento global es un invento de la izquierda radical

Reyes, presidentes, primeros ministros y catadores de alimentos se verán las caras en la sede de las Naciones Unidas, en lo que se ha convertido en una urgencia para la cual todos los participantes deberán mostrar estar a la altura.

Antonio Guterres, secretario general de la ONU, ha sugerido a los líderes de los países que no suban al podio sin “planes concretos y transformadores” para detener el aumento de las temperaturas globales, lograr la neutralidad del carbono y reducir las emisiones de carbono en un 45 por ciento”. 

La semana pasada una delegación de pueblos originarios denunció ante Michelle Bachelet, en Ginebra, las arbitrariedades del gobierno brasileño al que también le imputaron ser "cómplice" de la deforestación de millones de hectáreas para usufructo de productores de soja o ganado. Bolsonaro intentará demostrar que, tal como ha señalado en reiteradas oportunidades, el calentamiento global es un invento de la izquierda radical. Y que en el desastre del Amazonas, él no tiene ninguna responsabilidad. ¿Lo conseguirá?

Bolsonaro será el primer orador en la Cumbre del Clima