El Alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, ha alertado de que la guerra en Ucrania “ha entrado en una nueva fase sin duda peligrosa” y “un escenario temible” por la amenaza de ataque nuclear de Putin tras los avances del ejército ucraniano.
“La guerra ha entrado en una nueva fase. Una fase sin duda peligrosa, porque estamos ante un escenario temible, ante el que no tenemos que cerrar los ojos”, puesto que este "abarca a una potencia nuclear que en este momento está retrocediendo en el escenario convencional y que amenaza con utilizar el arma nuclear", por lo que "tenemos que demostrar que nuestro apoyo a Ucrania no flaquea", ha dicho Borrell durante su comparecencia este miércoles en el pleno del Parlamento Europeo.
“Es una batalla por la libertad de los ucranianos y la nuestra”
Cuando se cumplen siete meses (220 días) de la invasión de Rusia en Ucrania, los avances del ejército ucraniano hacen prever una nueva ofensiva del kremlin más allá de la guerra convencional. Por ello Borrell pide a los países miembros de la UE que sigan apoyando a Kiev. “No es una cuestión de generosidad, lo que allí se decide es también nuestro futuro”, porque “es una batalla por la libertad de los ucranianos y la nuestra”, ha dicho.
Pese a que la situación del ejército ruso “es muy mala” porque los soldados “no saben para qué es esta guerra” y las 300.000 personas reclutadas a la fuerza “lo van a entender menos todavía”, Rusia sigue teniendo “la superioridad numérica y de potencia de fuego”, ha advertido.
El jefe de la diplomacia comunitaria ha enfatizado en que la guerra se puede ganar en el campo de la batalla, pero también hay que ganarla “en el campo de las ideas” y “hay que seguir aislando a Rusia de forma continuada y permanente”. En su opinión, lo que busca Putin es minar la resistencia de Occidente con sus continuas amenazas de dejar a Europa sin suministro de energía a las puertas del invierno.
“Por encima de las sanciones concretas, lo que es realmente importante, es que los europeos entiendan, que, si hay un precio que pagar, ese precio merece la pena, porque si no pagamos este precio acabaremos pagando uno mucho mayor”, agregó.
Borrell asegura que el conflicto solo puede acabar de una manera que asegure la paz, y para ello "hace falta que Ucrania recupere su integridad territorial y su plena soberanía, que Rusia “asuma sus responsabilidades políticas y morales" del conflicto, y que pague por la reconstrucción de Ucrania.
Sobre la crisis energética, ha recordado que en el último año Europa ha reducido considerablemente su dependencia energética de Rusia, pasando de 12 millones de metros cúbicos de gas en agosto de 2021 a sol 4 este año. Las importaciones de Rusia han caído en las 36 semanas de 2022 en 54 millones de metros cúbicos, ha añadido.
A ello también se ha referido la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al destacar en su intervención que si al inicio de la guerra, las importaciones con Rusia suponían un 41%, en estos siete meses, se han reducido hasta el 7,5%. Esta reducción de la dependencia energética con Rusia se ha compensado con la importación de gas de EEUU y Noruega principalmente.
TOPE AL PRECIO DEL PETRÓLEO RUSO
Von der Leyen ha propuesto, entre otras medidas, poner un tope al precio del gas ruso y ampliar el programa RePower para acelerar la transformación energética.
También ha avanzado que, en colaboración con la OTAN y EEUU, se reforzará la seguridad de infraestructuras energéticas vitales, incluyendo los sistemas de vigilancia por satélite, susceptibles de ser atacadas y provocar interrupciones en el suministro de energía.
NUEVAS SANCIONES CONTRA RUSIA
Von der Leyen ha anunciado que los líderes de los 27 países aprobarán un nuevo paquete de sanciones contra Rusia en una cumbre que celebrarán en Praga el 6 y el 7 de octubre.
Estas medidas incluyen, además del tope del gas, la prohibición del transporte marítimo de petróleo ruso a terceros países por encima del límite del precio que Bruselas fijó para ese crudo, así como de los servicios relacionados.
Asimismo, la UE decretará la prohibición de importar productos de acero, pulpa de madera, papel, productos de ingeniería mecánica y aparatos electrodomésticos, productos químicos, plástico y cigarrillos de Rusia.
Por otro lado, la UE espera vetar la prestación de servicios informáticos, de ingeniería y jurídicos a empresas rusas.
